Sebastián González, el presidente de la financiera Soramus S.A, había sido imputado oficialmente el pasado 23 de octubre por haber estafado a 11 clientes de su empresa y en consecuencia haber causado un perjuicio económico de aproximadamente $187.000 millones.
El hombre había sido sometido a dos meses de prisión preventiva mientras la Fiscalía de Cibercriminalidad I que dirige María del Carmen Reuter investigaba las decenas de denuncias en su contra. En una audiencia realizada ayer, la auxiliar de fiscal María Paula Bellomío amplió la acusación y le endilgó 11 hechos nuevos.
La representante del MPF explicó que la financiera de González celebraba contratos de mutuos onerosos con la percepción de capital de propiedad de la víctima y su posterior reintegro con más sus intereses pactados en el contrato.
En ese contexto aparentando ser solvente frente a la multiplicidad de clientes que habían depositado la confianza para invertir sus ahorros y capitales y sabiendo que la empresa ya se encontraba en una situación económica crítica, comenzó a no hacer frente a lo pactado fingiendo frente a los terceros que iba a dar cumplimiento a sus obligaciones, pero nunca lo hizo.
Según informó Bellomío entre las 20 víctimas que tiene la causa hasta el momento, las estafas suman un total de más de $500 mil millones y U$D 25.000. Tras detallar los casos de las nuevas víctimas, la auxiliar solicitó que González continúe privado de la libertad por cuatro meses más. “Estamos en presencia de hechos graves. La estructura de esta estafa es tan grande que se ha necesitado declarar la causa como asunto complejo”, dijo.
La medida fue aceptada por el juez interviniente.