El 95% de los empleados públicos que rindieron el examen de idoneidad impulsado por el Gobierno nacional ya aprobó la primea instancia. Según el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, hasta el momento 9000 trabajadores estatales de planta transitoria y contratados completaron las pruebas, que son obligatorias e incluyen preguntas de competencias básicas.
El total de los que rendirán es de más de 40.000 trabajadores. Hasta ahora dieron el examen aquellos, cuyos vínculos expiran el 31 de diciembre debían rendir la evaluación como requisito obligatorio para renovar sus contratos.
Sturzenegger utilizó su cuenta de X para contar cómo avanza el proceso de evaluación. “Cuando llegamos al Ministerio de Desregulación nos pusimos como objetivo tomarle un examen a todo aspirante a ocupar un cargo en la administración pública. Queríamos una instancia apolítica que levantara la vara, jerarquizara el empleo público y que dificultara la incorporación de militantes políticos sin las calificaciones adecuadas”, dijo sobre las intenciones de su cartera.
De acuerdo a lo que contó Sturzenegger, hubo “sensaciones encontradas” a la hora de rendir: “Ansiedad de rendirlo, lo cual es obvio, pero mucha responsabilidad para prepararse y satisfacción al aprobarlo”.
Hay tres tipos de evaluaciones: una orientada a “servicios generales”, otra a “administrativos” y una última a “profesionales”. Todas son anónimas, tienen una duración de una hora y se realizan de manera presencial, en formato multiple-choice. Según se informó, los resultados se procesan de forma automática para evitar cualquier sesgo en la corrección.
Cada trabajador cuenta con tres intentos para aprobar el examen aunque, por ahora, casi la totalidad de los evaluados los rindió bien en la primera oportunidad.
El programa, diseñado para garantizar la idoneidad de los empleados públicos y optimizar la calidad del servicio estatal, ha generado repercusiones positivas en diversos sectores. Autoridades destacaron que la alta tasa de aprobación refleja tanto el compromiso de los trabajadores como la efectividad del proceso de capacitación previa.
Además, el Ministerio aseguró que aquellos que no aprueben en los tres intentos serán reubicados o desvinculados, en línea con la política de profesionalización de la administración pública promovida por el Gobierno.