Por María Inés Salvatierra
15 Diciembre 2024
Como ya nos tiene acostumbrados, el sistema previsional argentino sufre constantes modificaciones y, el año 2024 no fue la excepción. Desde movilidad, bono, moratoria y posible reforma profunda de cara al futuro.
Las prestaciones previsionales deben incrementarse periódicamente; este es un derecho garantizado en la Constitución Nacional y, respaldado legalmente a lo largo de estos últimos 15 años por varias leyes y decretos que normaron sobre el tema.
El año comenzó con una gran pérdida de poder adquisitivo de los haberes previsionales dado que el índice inflacionario fue elevadísimo en los primeros meses del año y la ley que se encontraba vigente entonces no contemplaba la inflación como un índice de cálculo para los incrementos de las jubilaciones.
A fines del mes de marzo y por DNU se dispuso que los beneficiarios del sistema tendrían incrementos mensuales por índice de precios al consumidor, más un 12,5% por única vez en el mes de abril para tratar de equiparar la pérdida sufrida en el mes de enero de 2024 (quedando igualmente 8 puntos por debajo). Desde abril y hasta la fecha, los aumentos son mensuales y el único índice a tener en cuenta es el índice de precios al consumidor.
En el mes de agosto se sancionó una nueva ley de movilidad previsional, que fue inmediatamente vetada por el Poder Ejecutivo y luego en el Congreso no se consiguieron los votos suficientes para ser sancionada de manera definitiva.
Bonos
Los $70.000 comenzaron siendo un monto extraordinario otorgado por el Gobierno nacional a los titulares de haberes mínimos y a los fines de paliar los efectos inflacionarios, pero terminó siendo incorporado como una suma no remunerativa por así decirlo, a los haberes mínimos.
No se incrementó si monto desde el mes de marzo a la fecha y tampoco se aplica sobre el mismo la movilidad, lo cual sería lo justo en estos casos.
En los últimos anuncios realizados en relación al sistema, ya se prevé que se abonaran los $70.000 durante el año 2025 a los beneficiarios de haberes mínimos previsionales
Luego de un año con muchos vaivenes relacionados al tema, finalmente se anunció la caducidad de la ley de moratoria previsional el 23 de marzo del año 2025; por lo cual quedarán fuera del sistema y de toda posibilidad de acceder a una prestación previsional y contar con cobertura médico asistencial, al menos las mujeres que vayan cumpliendo los 60 años de edad, y tendrían que esperar a cumplir los 65 años para acceder a la PUAM.
Aquellas mujeres que cumplan con la edad y los 30 años mínimos de aportes podrán acceder a la jubilación ordinaria. Recordemos que queda vigente aun la Ley 24476 de moratoria previsional y, en el caso de las mujeres el reconocimiento de años de aportes por cada hijo.
En el caso de los hombres, a los 65 años podrían acceder a la jubilación ordinaria por tener los 30 años mínimos de aportes o completando con moratoria de la Ley 24476, o en su defecto acceder a la PUAM.
Reforma previsional profunda
Este último punto es solo un anuncio, es decir no contamos aun con un proyecto de reforma previsional, pero al decir del gobierno nacional, querría elaborar un proyecto con un sistema de reparto, con la contratación paralela de un seguro de retiro individual (tema que venimos desarrollando y bregando por su contratación para mejorar el haber futuro) con la eliminación de los regímenes especiales y algunos puntos de reforma como la edad jubilatoria y la fórmula de cálculo del haber.
De igual manera, hasta que no tengamos el proyecto de ley no podremos analizar puntos de una posible reforma, pero sí, pueden adelantarse todos aquellos trabajadores que cuentan con los requisitos para acceder a la jubilación ordinaria y gestionar la prestación previsional bajo éste régimen vigente, de ese modo, una reforma futura no podría afectar su beneficio jubilatorio por ser un derecho adquirido.
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