En una decisión que busca modernizar y dinamizar el sector del transporte automotor de pasajeros, el Gobierno de Javier Milei oficializó hoy la reglamentación de la desregulación del servicio, a través de la Resolución Nº 57/2024, publicada en el Boletín Oficial. Impulsada por la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía y el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, la normativa adapta los procesos a un esquema más competitivo y eficiente.
La reglamentación, enmarcada en los decretos 883/2024 y 830/2024, introduce un cambio radical al sistema vigente, eliminando un régimen de más de tres décadas que se caracterizaba por permisos rígidos, altos niveles de burocracia y falta de flexibilidad. Ahora, el sistema será simple, declarativo, gratuito y completamente digital, sin comprometer los estándares técnicos ni las normas de seguridad.
Simplificación administrativa y transparencia
Los transportistas podrán registrarse de manera gratuita a través de la plataforma Trámites a Distancia (TAD). Este sistema permitirá la inscripción en un único Registro Nacional de Transporte Automotor de Pasajeros (RNTAP), agilizando el proceso administrativo y reduciendo la carga burocrática.
El trámite, obligatorio para todos los servicios de transporte de pasajeros, estará disponible a partir del 11 de diciembre y funcionará bajo la modalidad de Declaración Jurada (DDJJ). Entre los documentos requeridos se incluyen la nómina de vehículos y conductores, pólizas de seguros, títulos de propiedad o contratos de leasing, entre otros.
Una vez registrados, los transportistas recibirán el Certificado de Alta de Transportista en un plazo de cinco días hábiles, lo que les permitirá inscribir los servicios a prestar de manera rápida y eficiente. Aquellos operadores que ya estén en actividad tendrán un plazo de sesenta días para regularizar su situación en el nuevo sistema.
Mayor flexibilidad y competitividad
Con esta reglamentación, las empresas podrán establecer libremente recorridos, itinerarios, horarios, precios y modalidades de servicio. Esto representa una oportunidad para incrementar la oferta y fomentar la competencia en beneficio tanto de los pasajeros como de las empresas y transportistas.
En el sistema anterior, cualquier modificación en parámetros operativos podía demorar entre seis meses y un año. Con el nuevo esquema, estos ajustes solo requerirán una notificación de 15 días de antelación.
Compromiso con la seguridad
A pesar de la flexibilización, la normativa mantiene las exigencias de seguridad vigentes. Los transportistas deberán cumplir con las regulaciones de tránsito, seguridad vial y accesibilidad, además de someterse a revisiones técnicas vehiculares obligatorias.
Modernización y adaptabilidad
La medida refleja un esfuerzo por adaptar el transporte automotor de pasajeros a las demandas actuales, permitiendo servicios más ágiles y modernos. La desregulación no solo busca beneficiar al pasajero, sino también fortalecer al sector, promoviendo un transporte eficiente y competitivo acorde a las necesidades del país.
Esta reglamentación marca un punto de inflexión para un sistema que durante años estuvo estancado en esquemas obsoletos, abriendo el camino hacia una movilidad más dinámica y accesible para todos los argentinos.