La automotriz francesa Renault presentó oficialmente el renovado Kwid, que se posiciona como el modelo más barato no solo de su catálogo, sino de todo el mercado argentino. Aunque el regreso de este citycar estaba previsto para 2025, la marca decidió adelantar su lanzamiento.
Según se informó, el Kwid, fabricado en Brasil, llegó para recuperar el terreno perdido tras su discontinuación en octubre de 2021, ocasionada por restricciones a las importaciones. En su relanzamiento, Renault busca consolidarlo nuevamente como una opción accesible dentro del segmento de los autos citadinos.
Con un precio inicial de $17.900.000, el Kwid es más económico que su competidor directo, el Fiat Mobi ($19.550.000), y también supera al Renault Logan ($23.730.000) como la opción más asequible de la marca.
Diseño actualizado y mejoras en seguridad
El renovado Kwid muestra cambios en su diseño exterior, destacándose un frente más moderno con faros divididos en dos grupos, una parrilla renovada y paragolpes rediseñados. Además, incorpora mejoras significativas en seguridad: toda la gama cuenta ahora con control de estabilidad, cuatro airbags de serie (frontales y laterales delanteros), asistente de arranque en pendiente, anclajes Isofix para sillas infantiles y apertura eléctrica del portón trasero.
En el interior, el modelo suma un nuevo sistema multimedia con una pantalla de 8 pulgadas, compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Las dimensiones del vehículo se mantienen: 3,73 metros de largo, 1,58 m de ancho y 1,48 m de alto, con un baúl de 290 litros.
Motorización y financiación
El Kwid conserva su motor naftero de 1.0 litros, que ofrece 66 caballos de fuerza, y se combina con una caja manual de cinco velocidades. Para facilitar su adquisición, Renault ofrece un plan de financiación de hasta $10.000.000 con una tasa de interés del 0% en 18 cuotas fijas, a través de su financiera Mobilize Financial Services.
Un regreso estratégico
La vuelta del Kwid también responde a la necesidad de Renault de reforzar su presencia en un segmento golpeado por la crisis económica y la salida de varios competidores, como el Ford Ka, el Nissan March, el Toyota Etios y el Volkswagen up!.
Desde su lanzamiento inicial en 2017, el Kwid fue un éxito comercial, con más de 45 mil unidades patentadas en sus primeros cuatro años. Su regreso promete reavivar el interés por los citycars, una categoría que había quedado relegada en el mercado local.