Mientras el fiscal Mariano Fernández trata de identificar a los autores del ataque a balazos que sufrió Facundo Ale, el segundo señalado negó haber tenido algún tipo de participación en el hecho y solicitó al representante del Ministerio Público que le permita colaborar en la investigación.
El sábado, el hijo de Ángel “El Mono” Ale recibió tres disparos en la esquina de General Paz y Amador Lucero. Según los investigadores, el ataque que sufrió el joven está vinculado a una feroz interna por el dominio de la barra brava de San Martín.
El domingo, en la tribuna que da a la calle Rondeau, los simpatizantes colocaron una bandera acusando a Javier “Chuky” Casanova y a Walter “Petiso David” Lobo de estar vinculados a la comercialización y tráfico de drogas. Para los pesquisas este mensaje fue para complicar a los supuestos interesados en quedarse con el dominio de la barra brava.
Lobo fue el primero en aclarar su situación. En una entrevista con LA GACETA dijo que no le interesaba formar parte de ese grupo y rechazó tener algún tipo de vinculación con la droga. “Me pueden investigar todo lo que quieran para ver que no tengo nada que ver”, declaró.
Ayer fue el turno de Casanova. Según fuentes judiciales, su defensor Patricio Char presentó un escrito solicitando que se le permita colaborar con la Justicia y la Policía para esclarecer los hechos. “Él no tiene ninguna relación con este hecho”, se lee en el documento.
El profesional también señaló que su asistido tuvo que cambiar de domicilio por temor a represalias, ya que habría recibido graves amenazas de muerte dirigidas a él y a su familia. “Estamos dispuestos a proporcionar el nuevo lugar donde reside únicamente a la fiscalía, con la firme intención de que no se haga público en el legajo ni se comparta esa información con la fuerza, porque han sido mencionados como partes de las intimidaciones y persecuciones sufridas”, señaló en el escrito.
Lo que sea necesario
El jefe de Policía Joaquín Girvau no sólo desmintió esa versión, sino que envió un mensaje a Casanova. “Le digo que se quede tranquilo porque la Policía no persigue a nadie. Pero cuando tiene una orden judicial en su poder, hará todo lo que sea necesario para cumplirla”, comentó.
Por último, el fiscal Fernández espera que Ale se presente a ratificar la denuncia en su oficina. Hasta el momento, el joven no hizo ninguna denuncia policial, solo una presentación judicial a través de sus defensores Ricardo Fanlo y Agustín Monteros. Se estima que en las próximas horas lo haga. En caso de encontrarse a los autores, serán acusados de lesiones leves.