Una gran polémica se desató en las últimas horas en la Premier League. El último fin de semana, la gran mayoría de los capitanes de la liga inglesa saltó al campo de juego con la cinta pintada con los colores de la comunidad LGBT+, en el marco de una campaña impulsada por las autoridades. Dos de ellos, sin embargo, no estuvieron de acuerdo.
Sam Morsy, capitán de Ipswich Town y musulmán practicante, decidió no usar la cinta con los colores de la comunidad LGBT+ por motivos religiosos. El club explicó la situación, pero respaldó la campaña. “El Ipswich Town Football Club se compromete a ser un club totalmente inclusivo que dé la bienvenida a todos. Apoyamos con orgullo la campaña Rainbow Laces de la Premier League y apoyamos a la comunidad LGBTQ+ en la promoción de la igualdad y la aceptación”, señalaron en un comunicado.
Por su parte, Marc Guehi, capitán de Crystal Palace, usó la cinta, pero le agregó una frase religiosa: “Amo a Jesús”. Esta acción fue criticada, y según trascendió, podría acarrear sanciones, ya que las reglas de la Premier League prohíben “lemas, declaraciones o imágenes políticas, religiosas o personales” en accesorios.
El antecedente similar en la Premier League
En 2023, en la misma campaña, conocida como “Rainbow Laces”, también se había generado polémica, con el capitán de Sheffield United.
El defensor bosnio Anel Ahmedhodzic fue quien, en aquella ocasión, se negó a utilizar la cinta, aunque nunca explicó por qué tomó esa decisión. “No lo sé. No es ni una decisión personal ni del club. Simplemente, no sé por qué lo hizo”, contó en aquel momento su entrenador Chris Wilder.