A más de diez años de la desaparición de María Cash, la investigación continúa avanzando y desvelando detalles inquietantes sobre los últimos movimientos del camionero Héctor Romero, hoy imputado por homicidio calificado por alevosía.
Entre los hallazgos más impactantes, se encuentra una nueva línea de investigación que apunta a la posibilidad de que Romero haya regresado al lugar donde, según la Fiscalía, habría escondido el cuerpo de María, un mes después de la desaparición de la joven. Este descubrimiento reabre el caso, planteando interrogantes sobre los patrones de comportamiento de Romero y las pruebas que podrían vincularlo de manera aún más directa con el hecho.
La investigación de los movimientos de Romero: un año de análisis
Para entender mejor los hechos que rodean la desaparición de María Cash, los investigadores realizaron un exhaustivo análisis de los impactos telefónicos de Héctor Romero durante un año completo, 2010/2011, con el fin de detectar cualquier anomalía en sus viajes previos y posteriores a la desaparición. Este minucioso trabajo permitió obtener una imagen detallada del comportamiento del camionero, de los patrones de sus trayectos, horarios y duración de los viajes.
El análisis de la línea de Romero reveló que los viernes, cuando viajaba con un camión diferente al que usaba los lunes, sus trayectos entre Gral. Güemes y González tomaban un promedio de dos horas y media. Sin embargo, el día de la desaparición de María, el viaje que emprendió Romero desde Gral. Güemes hasta J.V. González fue más largo de lo esperado. Salió a las 15:54 y llegó a su destino a las 18:42, con un tiempo total de 2 horas y 47 minutos.
Lo que llamó especialmente la atención fue la declaración del encargado del supermercado Miguelito en J.V. González, quien indicó que Romero había llegado al lugar a las 19:15, según los registros de la empresa. Esto dejó abierta una ventana de tiempo de 33 minutos entre su llegada a González, registrada a las 18:42, y su llegada al supermercado, que debería haber tomado solo unos minutos.
Este desajuste entre los tiempos documentados y la declaración de Romero puso en evidencia una discrepancia importante. ¿Qué hizo Romero durante esos 33 minutos? ¿Por qué el trayecto de aproximadamente 1,5 km, que normalmente se recorrería en 5 minutos, tardó media hora más?
El viaje de regreso
Una de las partes más desconcertantes del caso tiene que ver con el regreso de Romero a Gral. Güemes, que ocurrió más tarde esa misma noche. Según la declaración del camionero, él dijo haber tardado dos horas en descargar la mercadería en el supermercado y haber regresado a Gral. Güemes a las 00:30, tras salir de J.V. González a las 22:00. Sin embargo, el análisis de las comunicaciones de su teléfono móvil mostró que su línea impactó en una antena en la salida de J.V. González a las 21:07, lo que contradice su versión sobre la hora de salida.
Este desfase en los tiempos de viaje resultó en una discrepancia significativa. Romero afirmó que el viaje de regreso le tomaba dos horas y media, pero la investigación encontró que el tiempo real fue de aproximadamente 3 horas y 23 minutos. La diferencia de casi una hora en su tiempo de retorno genera aún más preguntas. ¿Por qué Romero se demoró tanto en regresar a Gral. Güemes? Y más importante aún, ¿qué sucedió en ese tiempo no explicado?
Al intentar corroborar su versión, los investigadores también descubrieron que Romero, en otros momentos, había tenido retrasos menores en su ruta, pero ninguno de ellos alcanzó tal magnitud como el de la noche de la desaparición de María Cash. Lo que parecía ser una simple demora pasó a convertirse en una pieza clave dentro del rompecabezas de los hechos, indicando que algo extraño pudo haber sucedido en ese trayecto.
Movimientos un mes después de la desaparición de María Cash
Lo que generó gran revuelo entre los investigadores fue un hallazgo que se produjo un mes después de la desaparición de María Cash. El 8 de agosto de 2011, el análisis de las antenas mostró que la línea de Romero hizo una parada sospechosa en la zona de El Tunal, sobre la Ruta 16. Esta detención duró aproximadamente 1 hora y 20 minutos, y fue detectada justo en el momento en que se cumplía un mes de la desaparición de María.
Este hallazgo plantea una inquietante hipótesis: Romero podría haber regresado al lugar donde habría arrojado, según los investigadores, el cuerpo de María Cash, exactamente un mes después del hecho. En esa fecha, su teléfono móvil registró un impacto en El Tunal a las 17:14, y no volvió a registrar actividad hasta las 19:10, cuando alcanzó J.V. González. La distancia entre El Tunal y J.V. González es de aproximadamente 35 km, una distancia que un camión cargado recorrería en 30 a 40 minutos, pero Romero tardó casi dos horas en cubrirla.
Este tipo de irregularidad en su patrón de comportamiento no solo se asemeja a lo ocurrido el día de la desaparición de María, sino que también sugiere que Romero podría haber detenido el camión en la misma zona donde arrojó el cuerpo de la joven, lo que abre un nuevo capítulo en la investigación. El hecho de que el camionero detuviera su vehículo en la misma localidad en dos ocasiones críticas —el día de la desaparición y el mes siguiente— aumenta la sospecha de que algo más siniestro pudo haber ocurrido.
Cabe recordar, que el fiscal del caso, Eduardo Villalba, solicitó que se realizaran rastrillajes en la zona mencionada.
Interrogantes
A pesar de la cantidad de evidencia que comienza a acumularse, todavía quedan muchas preguntas sin respuestas. El análisis de los movimientos de Romero y sus tiempos de viaje han dejado más dudas que certezas. Entre los interrogantes más inquietantes se encuentran:
¿Qué hizo Romero entre las 18:42 y las 19:15, cuando llegó al supermercado según los registros, pero su antena en González indicó que llegó antes?
¿Por qué Romero no mencionó la hora exacta en la que salió de J.V. González, si el análisis de su teléfono mostró que había dejado la localidad mucho antes de lo que él declaró?
¿Qué ocurrió durante el trayecto de regreso a Gral. Güemes, donde la demora fue casi una hora más larga de lo esperado?
¿Por qué, exactamente un mes después de la desaparición de María, Romero hizo una parada sospechosa en El Tunal y se detuvo durante más de una hora sin explicación?
Estas preguntas aún son materia de investigación. En los próximos días la Justicia podría trasladarse al lugar y realizar una reconstrucción de los hechos, para que Romero detalle su versión.