NOVELA: REGRESO A CASA / MARCOS ROSENZVAIG (Dedalus – Buenos Aires)
Regreso a casa, la nueva novela del prolífico autor tucumano Marcos Rosenzvaig, recupera un tópico clásico para la literatura como es el viaje de regreso. Sin embargo, no se atiene a las convenciones de un género específico, ya que el cuerpo narrativo sufre una serie de transformaciones que lo sustraen de una prosa tradicional para otorgarle un carácter experimental.
Contada a partir de múltiples puntos de vista que ofrecen, a su vez, versiones e interpretaciones de los hechos, la novela -en el plano formal- se permea con otros dominios escriturarios tales como el dramatúrgico. Rosenzvaig es un escritor que explora la potencialidad del borde de los géneros. En efecto, su propuesta estética puede pensarse como una poética del desborde.
Además del trabajo con la escritura es destacable la inscripción de la oralidad en el relato. Más allá de la literalidad del regreso a la casa paterna, tematizado en la novela, podemos ensayar la hipótesis de que la lengua familiar es una de las casas a las que se regresa. El idish perfora la lengua social, entendida como pública, para fugar, por sus resquicios, el código de la intimidad. La lengua oída, con su fraseo y repertorio de lugares comunes, recupera la dimensión afectiva de una familia judía típica, atravesada por sucesivas pérdidas y acorta la distancia que todo viaje supone.
La muerte del padre, como núcleo de sentido, devela una trama vincular compleja signada no sólo por las disputas internas familiares, sino también por el pulso de la historia social. Las escenas mínimas nos permiten recuperar -o tensionar- el macrorrelato histórico y postular narrativas singulares de la memoria.
El quiebre de la familia se produce a partir de la desaparición de Mariana y del exilio de Enrique durante la última dictadura militar argentina. Esta herida en el cuerpo familiar -y social- espeja la vida de Mariana con la de la tía Greta, una anciana que recupera su propia experiencia de exilio y persecución durante la segunda gran guerra y la avanzada nazi en Varsovia. Al desafío que implica el carácter fragmentario del relato hay que sumar los saltos y desvíos temporales que sedimentan otras voces en la trama que, además de caleidoscópica, conforma un palimpsesto.
En uno de los pasajes finales puede leerse: “Todo lo que no comprendemos espanta”. En este sentido, la novela ofrece a los lectores un espacio crítico y reflexivo, que trasciende el mero goce por la palabra literaria o el hecho estético en sí mismo, para “aflojar” los nudos que ciñen nuestra existencia e iluminar nuestras zonas opacas sin garantías de claridad o redención, pero con el deseo de entender que es, en cualquier caso, una promesa posible.
Por Verónica Juliano
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PERFIL
Marcos Rosenzvaig nació en Tucumán, en 1954. Es profesor de Letras por la UNT y doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Málaga. Es actor, director y autor de numerosas obras de teatro, como El veneno de la vida, Tragedias familiares, El pecado del éxito, Niyinsky y Regreso a casa, y de varios ensayos, entre ellos El teatro de la enfermedad, Tadeusz Kantor o los espejos de la muerte y Copi: sexo y teatralidad.