El árbol genealógico de la humanidad es particularmente amplio: al menos 20 especies evidencian los pasos de nuestra evolución. Al separarnos de los simios hace unos siete millones de años atrás, los primeros homínidos comenzaron a desarrollarse. Cada uno de ellos habitó un tiempo diferente, o al menos eso parecía ya que un sorprendente descubrimiento en un lago de Kenia reveló que dos especies distintas de nuestros ancestros humanos habitaron en nuestro planeta en el mismo momento.
La evolución humana es un proceso gradual de cambio biológico desde los ancestros más primitivos hasta la actualidad. Así parece que este concepto no admite sincronía, ya que cada especie se transforma de la anterior. Sin embargo, la evidencia fósil parece contrariar esta teoría: una serie de huellas de barro en las orillas de un lago en Kenia demostraron que dos especies de homínidos convivieron al mismo tiempo y esos son el Homo Erectus y Paranthropus boisei.
Hallaron las huellas de dos especies de homínidos que compartieron el mismo lugar hace 1.5 millones de años
Las huellas encontradas en el país de África Oriental son la primera evidencia de que dos especies de humanos ancestrales caminaron en el mismo suelo simultáneamente hace 1.5 millones de años. La pisadas se hallaron en el barro y pertenecen a dos especies diferentes “en cuestión de horas, o como máximo días”, según la paleontóloga Louise Leakey, coautora de la investigación publicada el jueves en la revista Science.
Según el estudio,las huellas estaban incrustadas en barro seco y enterradas en sedimentos en un importante yacimiento de fósiles. Al analizar las formas de las mismas y los patrones de impacto, los investigadores descubrieron que los dos conjuntos eran distintos; la mejor explicación, concluyeron, es que dos especies de homínidos diferentes dejaron aquellos rastros.
“Creemos que estos individuos, estas dos especies que estaban allí, probablemente habrían sido conscientes de que había miembros de otra estirpe cerca. Se habrían visto y reconocido como especies diferentes, lo que plantea preguntas sobre cómo habrían sido esas interacciones”, dijo Kevin Hatala, profesor asociado de biología en la Universidad de Chatham y autor principal de la investigación. “¿Eran competidores? ¿Estaban totalmente de acuerdo con que el otro estuviera allí?".
Homo erectus y Paranthropus boisei, dos especies muy diferentes que habitaron al mismo tiempo
Aunque ambos son parientes humanos, el Homo erectus y el Paranthropus boisei presentaban rasgos muy diferentes y sus destinos dentro del árbol genealógico humano tomaron rutas marcadamente diferentes.
El Homo erectus tenía una anatomía parecida a la humana desde el cuello hacia abajo. La especie utilizaba herramientas de piedra y podría haber cocinado con fuego. Sus miembros tenían una dieta variada que probablemente incluía carne. La especie finalmente se extendió a Asia, Indonesia y otras regiones, y sobrevivió durante más de un millón de años después de que se formaran las huellas recién descubiertas. El Homo erectus apareció por última vez en el registro fósil hace poco más de 100.000 años .
Mientras tanto, el Paranthropus boisei tenía cerebros más pequeños, músculos masticatorios enormes y molares grandes. William Harcourt-Smith, profesor asociado de antropología en el Lehman College que no participó en el estudio, dijo que la especie probablemente evolucionó para comer alimentos difíciles como nueces duras o para triturar alimentos duros y de baja calidad como plantas arbustivas. Sin embargo, la especie no duró en la Tierra tanto tiempo como el Homo erectus.
"Se cree que se extinguieron poco después de esto, en los siguientes cientos de miles de años", dijo Hatala, refiriéndose al momento en que se encontraron las huellas. Agregó que nadie sabe con certeza qué sucedió, pero es posible que los cambios en el medio ambiente hayan restringido sus dietas especializadas.