19 Noviembre 2024
Atlético Tucumán saldó una vieja deuda y mostró la contundencia suficiente para doblegar a Huracán
¡Qué final, “Pulga”! La definición del 4-2 de Atlético fue magnífica. Un remate cruzado para estampar el resultado definitivo y ahogar las esperanzas de Huracán. Fue el final para la montaña rusa de emociones que se vivió en el José Fierro. Es cierto, el “Decano” no fue superior al “Globo” ni mostró un mejor nivel de juego, pero demostró una virtud crucial para la etapa decisiva del torneo: la contundencia. La estadística sostiene esta calificación: el equipo de Facundo Sava generó seis llegadas, y cuatro terminaron en la red.
El partido fue ultraparejo en todas las líneas. Ninguno se apropió del mediocampo ni dominó el ritmo del partido. Es más, solo se limitaron a aprovechar los errores del rival, y Atlético fue el primero en golpear. Marcelo Estigarribia, que continúa con la racha goleadora -anotó el sexto en el torneo-, capturó un rebote de la defensa de Huracán y abrió el marcador para el conjunto de 25 de Mayo y Chile.
Una situación similar sucedió en el segundo gol. Moisés Brandán lanzó un potente remate al área, Renzo Tesuri la desvió y dejó sin reacción a Sebastián Meza, que se limitó a ver como la pelota ingresaba en el arco. Una nueva desatención de la defensa de Huracán finalizaba en el gol.
Los dos tantos hicieron que Atlético creciera en el juego. Guillermo Acosta ahogó a los volantes de Huracán, mientras que Adrián Sánchez intentó profundizar en los últimos metros. Pero, pese a estos intentos, solo generó una ocasión clara que terminó con una pirueta de “Chelo”. La única jugada de peligro que no terminó en la red.
El descuento de Huracán también nació a partir de un error. Walter Mazzantti lanzó un pase filtrado hacia Rodrigo Cabral, que venció en velocidad de Brandán, y aprovechó la mala salida de Tomás Durso.
El tanto fue el impulso necesario que el “Globo” necesitaba para volver a meterse en partido.
El único gol que rompa con la regla fue el que marcó William Alarcón. El volante chileno aprovechó un tiro libre y colocó el empate parcial con un potente remate, que ingresó en el ángulo izquierdo del arco que da hacia calle Chile.
La paridad hizo plagar de dudas a Atlético. A eso se sumó que el ingreso de Ramón Ábila complicó demasiado a la zaga central de Nicolás Romero y Néstor Breitenbruch. Todo esto daba la sensación de que el “Globo” estaba a un paso de encontrar el gol de la ventaja, pero nada de eso sucedió.
Un centro preciso de “Bebe” y un cabezazo de Tomás Castro Ponce permitieron que el “Decano” recuperase la ventaja. Mientras que Luis Miguel Rodríguez terminó de cerrar el partido y apagó la ilusión de Huracán.
Todo esto deja en claro que el “Decano” recuperó la compostura en el momento justo y ganó tres puntos claves para seguir en la carrera por las copas internacionales.
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