Vivir con una jubilación mínima es una odisea que se hace aún más difícil con un bono congelado

Vivir con una jubilación mínima es una odisea que se hace aún más difícil con un bono congelado

El haber jubilatorio más bajo roza el nivel de ingresos para no caer en situación de pobreza. El gasto previsional contribuyó al superávit.

LA MÍNIMA. Las jubilaciones no perderán frente a la inflación en los próximos meses, pero están lejos de recuperar el poder adquisitivo, según el CEPA. LA MÍNIMA. Las jubilaciones no perderán frente a la inflación en los próximos meses, pero están lejos de recuperar el poder adquisitivo, según el CEPA.

Las jubilaciones mínimas están lejos de los privilegios. Si se toma en cuenta el haber que percibía la ex presidente Cristina Fernández por el cargo que ocupó más la pensión que le dejó Néstor Kirchner, ella acumula más de $ 21 millones al mes, el equivalente a 86 haberes mínimos. En diciembre, esa remuneración de la clase pasiva subirá un 2,69%, según comunicó la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), con una mínima que pasará a $ 259.599, pero, con el bono, esa suma subirá a $ 329.599 mensuales, casi rozando el monto mínimo que una persona necesita para no ser considerada pobre, de acuerdo con la medición de octubre del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Según los cálculos oficiales, la Canasta Básica Total (CBT) para un adulto equivalente fue de $ 319.283,60 mensuales. El Gobierno nacional sostuvo el superávit fiscal a costa de las jubilaciones, indica un reciente informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA). En el período enero-septiembre de este año, el 25,3% del ajuste del gasto del Estado estuvo explicado por la pérdida de poder adquisitivo de las jubilaciones y pensiones, explica la entidad.

Vivir con una jubilación mínima es una odisea que se hace aún más difícil con un bono congelado

Según el CEPA, el presidente Javier Milei modificó la fórmula previsional mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia 274/24, atando los haberes a la inflación. Así, derogó la Ley 27.609 vigente desde 2021. “Si bien la fórmula atada al Índice de Precios al Consumidor (IPC) permitió recuperar parte del terreno perdido en el primer trimestre, a esta altura podemos concluir que la fórmula anterior, en el tiempo, hubiera sido superadora para los haberes jubilatorios, y se la eliminó intencionalmente antes de que se produjeran las mejoras”, considera la entidad. Tanto en septiembre como en diciembre, los aumentos por la fórmula anterior hubieran sido superiores a los efectivamente otorgados. En diciembre, con la fórmula de Milei, la jubilación mínima (sin bono) se ubicará -como se dijo- en $ 259.599, mientras que de haber continuado la fórmula anterior se ubicaría en $ 314.303 (21,1% por encima).

El bono compensatorio

Paralelamente, desde marzo, el bono compensatorio que recibía el 70% de los jubilados fue congelado en $ 70.000, licuando mes a mes su capacidad de compra, advierte el reporte al que accedió LA GACETA. Mientras que los haberes se incrementaron entre marzo y diciembre 93,1%, la mínima, con bono incluido, sólo aumentó 61,2%. De haberse actualizado en la misma proporción, el bono debiera ser en diciembre de $ 135.140, es decir, $ 65.140 más de lo actual, subraya el reporte. En la actualidad, casi la mitad de los jubilados perciben la mínima (unos 3 millones de beneficiarios). Al atar las jubilaciones al IPC, éstas no perderán poder adquisitivo pero tampoco podrán recuperar, sostiene el CEPA. Por el contrario, acota, la Ley 27.756 sancionada por el Congreso y vetada por el Ejecutivo incluía: una recomposición por única vez de 7,2% para todos los haberes, un haber mínimo equivalente al 109% de la CBT de un adulto, y una cláusula gatillo una vez al año (en marzo) si hubiere recuperación real de los salarios en el año calendario anterior. Asimismo, se prevé que la fórmula de movilidad deje de aplicar a las asignaciones familiares. En cuanto a la moratoria previsional, el gobierno confirmó que no se prorrogará por lo cual vencerá en marzo. Esto implica que 9 de cada 10 mujeres y 8 de cada 10 varones en edad de jubilarse, deberán conformarse con una Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), equivalente al 80% de la jubilación mínima y no pensionable.

Vivir con una jubilación mínima es una odisea que se hace aún más difícil con un bono congelado

Como señala el dirigente de los Abuelos de la Patria, Luis Arroyo, el aumento resulta irrisorio frente a la actualización brusca de los precios que la actual gestión aplicó desde que asumió el poder en diciembre pasado. En el caso de la jubilación mínima, el aumento anunciado por la Anses (del 2,69%) implicará una mejora de $ 204 por día, mientras que aquellos que cobran la pensión, el aumento será de $ 159 diarios.

Con el esquema aplicado por el Gobierno los jubilados cerrarán el año con un aumento nominal -sin incluir el bono- de 145,6%, un índice superior al de la inflación medida por el Indec. En cambio, el monto integrado por la jubilación mínima más el bono de $ 70.000 desde marzo, tendrá una suba nominal acumulada de 105,1%.

Comentarios