¿Perdiste a tu gato? Conoce el popular método japonés para traerlo de vuelta

Los gatos son mucho más que simples mascotas; forman parte de la familia, alegran nuestros días y nos brindan amor incondicional. Pero su naturaleza curiosa e independiente puede jugar en su contra cuando, por un descuido, logran escabullirse y perderse. Para esos momentos de angustia, existe un curioso método japonés que ha cobrado notoriedad en redes sociales. La pregunta es: ¿funciona realmente?

¿Por qué los gatos se pierden?

Los motivos por los que un gato puede perderse son variados. Su instinto cazador y su insaciable curiosidad los llevan a explorar más allá de los límites del hogar. En zonas rurales, están más acostumbrados a salir, mientras que en entornos urbanos el peligro de perderse es mayor. Perseguir un rastro de comida, huir tras ser asustados por otro animal o escaparse durante el celo son solo algunas de las razones por las que pueden alejarse.

Aunque en la mayoría de los casos los gatos suelen regresar por su cuenta, si pasa un tiempo considerable sin noticias de ellos, es natural preocuparse. Por eso, tener un microchip o un dispositivo de rastreo es fundamental. Pero, ¿qué hacer cuando esto no es suficiente?

El método japonés: hablar con gatos callejeros

El peculiar truco japonés para encontrar a un gato perdido se popularizó en Twitter gracias a usuarios que compartieron su experiencia. Consiste en recorrer tu vecindario y hablar con los gatos callejeros, explicándoles que tu mascota está perdida y pidiéndoles que la ayuden a regresar. Aunque suene insólito, hay quienes aseguran que, tras realizar esta "comunicación" con los felinos del barrio, su gato apareció nuevamente en casa.

La premisa detrás de este método es que los gatos callejeros "pasen el mensaje" hasta que llegue a tu mascota, ayudando de alguna manera a que regrese. Aunque carece de base científica y suena más a leyenda urbana, la idea resonó entre quienes han pasado por el mal trago de buscar a un gato perdido.

¿Realidad o mito?

No existen estudios que respalden este curioso truco japonés, más allá de las anécdotas de quienes aseguran que funcionó. Tal vez sea una coincidencia o el reflejo de un deseo de encontrar una relación causa-efecto. Sin embargo, ante la desesperación de perder a un miembro de la familia de cuatro patas, cualquier opción parece válida si no causa daño.

Probar este método no cuesta nada y, al final del día, recorrer el vecindario y hablar con los gatos callejeros puede ser otra forma de mantener la esperanza. Si ayuda a aliviar la angustia o, con un poco de suerte, realmente contribuye a que tu gato regrese, habrá valido la pena intentarlo.