A pedido del fiscal general Eduardo Villalba, el juez federal de Garantías de Orán, Gustavo Montoya, formalizó este miércoles la imputación y ordenó el arresto domiciliario del intendente de Coronel Juan Solá, Atta Miguel Gerala, en el marco de la investigación por el robo y contrabando de rieles desde el Chaco salteño hacia Bolivia. La acusación incluye delitos de contrabando, robo y malversación de fondos públicos, entre otros.
El fiscal Villalba ya había anticipado la posible imputación del intendente, luego de la detención y acusación de su hijo, José Miguel "Yopi" Gerala, y el comerciante David Edilberto Medina, quienes también están involucrados en la maniobra ilícita. En la audiencia, el fiscal presentó pruebas que vinculan al jefe comunal con la red de contrabando y el robo de material ferroso.
Los cargos contra el intendente
El fiscal formalizó la imputación contra Gerala por los delitos de contrabando agravado por su valor y la participación de un funcionario público, en concurso con robo agravado por ser cometido en despoblado y en banda, en grado de partícipe necesario. Además, se le imputa la malversación de caudales públicos por el uso de bienes del municipio con fines personales.
El fiscal también solicitó el levantamiento del secreto bancario, fiscal y bursátil, así como el arresto domiciliario del intendente hasta el 31 de diciembre de 2024. La investigación, según Villalba, está en una segunda fase y se espera que surjan nuevos involucrados en el caso del robo y contrabando de rieles.
La trama del contrabando
El caso comenzó en agosto de 2023, cuando personal de Correo Argentino denunció el envío sospechoso de neumáticos a través de encomiendas, lo que llevó a la investigación de Medina, un comerciante con antecedentes por contrabando. Durante la pesquisa, se descubrió que Medina no solo traficaba neumáticos de Bolivia, sino también rieles robados del Ramal C-25, entre las localidades de Padre Lozano y Morillo, en el chaco salteño.
Las investigaciones también revelaron que el hijo del intendente, "Yopi" Gerala, estaba involucrado en el robo de los rieles, que posteriormente eran vendidos en Bolivia. Parte del material robado era resguardado en la casa del propio intendente y en instalaciones municipales, lo que permitió probar la implicación del jefe comunal.
Malversación de fondos públicos
El fiscal señaló que los Gerala usaron maquinaria y herramientas del municipio para llevar a cabo el robo de los rieles. Además, se comprobó que los rieles sustraídos eran almacenados en predios municipales y en la casa del intendente, desde donde fueron secuestrados 15 rieles valuados en aproximadamente 19 millones de pesos.
El fiscal también destacó que los implicados contaban con una infraestructura organizada para cometer el robo y que la colaboración de la comunidad local, principalmente de comunidades originarias, fue crucial para llevar a cabo el saqueo.