Una estación climática para hidratarse y mitigar el calor
Establece que los vecinos participen de la elaboración de proyectos para los barrios La intendenta Rossana Chahla habilitó refugios en las peatonales para que los vecinos se protejan de las altas temperaturas y hasta reciban repelentes para combatir el dengue. Funcionará este mes y diciembre.
Tiempo de humedad; riesgo de dengue. Período de calores y de exposición a la deshidratación, particularmente en la población de adultos mayores. Esas son algunas de las razones por las que la Municipalidad de San Miguel de Tucumán instaló en pleno centro una estación climática. ¿Qué es eso? Lo explica la intendenta Rossana Chahla: se trata de un espacio de resguardo y bienestar para que los vecinos se protejan de las altas temperaturas del verano tucumano.
La puesta en funcionamiento de este refugio ambiental forma parte de un programa articulado entre la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable y la Dirección de Salud, con el objetivo de adaptar los espacios públicos para hacer frente al cambio climático.
En la estación climática del Municipio los transeúntes pueden hidratarse y consumir frutas, acceder a atención médica gratuita, con la presencia de personal especializado que realizará controles de presión arterial, e informarse sobre la prevención del dengue, se explicó desde el municipio capitalino. El refugio ambiental, que estará disponible los sábados de noviembre y diciembre en las peatonales céntricas, de 9 a 13, también cuenta con una zona de relajación a través de aromaterapia. Además, se realizan actividades como talleres de elaboración de repelente casero, se brindan charlas sobre las consecuencias del cambio climático y cómo esto afecta a la salud, entre otras acciones orientadas a la educación ambiental.
Chahla explicó que el objetivo de contar con estos refugios ambientales es concientizar a la población sobre el cambio climático y su impacto en la salud. “El cambio climático ha hecho estragos en todas partes del mundo y nosotros no estamos ajenos a eso. Sabemos que hay mucha gente que sale a hacer alguna compra o a recorrer el centro, y alguna vez se puede sentir mal, con desgano o se baja la presión, y en estas estaciones climáticas podrán recibir atención los vecinos, hidratarse, tomarse la presión, informarse sobre cómo prevenir los golpes de calor y protegerse de las altas temperaturas”, remarcó la jefa municipal, que ayer estuvo en la peatonal junto con parte de su gabinete y con el personal afectado al operativo.
La intendenta dijo que también se trabajará en la prevención del dengue. “Se va a enseñar cómo preparar repelente casero de citronela, como hacer un espiral para ahuyentar a los mosquitos, porque queremos reforzar la prevención en esta época”, acotó.
La jefa municipal agregó que los refugios climáticos constituyen “puestos de hidratación, con un lugar de protección solar, prevención del dengue y todo lo que tiene que ver con el cuidado de las personas en esta época de altas temperaturas”.
Por su parte, la secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Julieta Migliavacca, remarcó que esta es “una medida de adaptación al cambio climático, que existe y que como seres humanos debemos adoptar medidas para enfrentar esta realidad”.
La funcionaria indicó que “esta estación climática o refugio ambiental es una estrategia donde las personas que estén circulando por el centro, ante los síntomas del calor, puedan sentarse tomar agua, hidratarse, tomarse la temperatura y la presión arterial, recibir un masaje de relajación y concientizarse sobre la importancia de protegerse de las radiaciones solares y de las enfermedades transmitidas por mosquitos, que son dos consecuencias del cambio climático”.
A su turno, la directora de Salud, Fernanda Rodríguez, resaltó que “el cambio climático, más allá de todos los efectos adversos en el medio ambiente, también afecta a la salud individual y comunitaria, por lo que desde el Municipio vamos a hacer controles de presión arterial y dar todas las pautas a los vecinos sobre cómo deben actuar ante un golpe de calor”. Y enfatizó: “Son cinco minutos para que puedan controlarse, hidratarse y seguir adelante en su paso por el microcentro”.