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Pan sin harinas, una receta liviana e ideal para el desayuno.
Uno de los alimentos al que mayores restricciones se les imponen en las dietas saludables es el pan, sobre todo si se trata de su variedad más blanca. Sin embargo, a veces resulta una tarea complicada excluir de nuestra alimentación a una de las comidas más consumidas alrededor del mundo, debido en gran parte a su disponibilidad y su precio asequible. Pero existen otras formas de preparar este alimento que se ajusta perfectamente a un régimen más sano, como es el caso del pan sin harinas, hecho a base de almendras trituradas.
El pan sin harinas es una receta además de deliciosa, sumamente saludable. Esta preparación es libre de gluten, lo que lo hace más liviano y adaptable a las distintas dietas. Además, su versatilidad nos permite consumirlo en una gran diversidad de formas, una de ellas como tostadas en el desayuno, siendo un perfecto reemplazo del pan blanco bajo en aportes nutricionales debido al proceso de refinamiento que sufre el germen de trigo.
¿Cuáles son los beneficios del pan sin harinas?
El componente fundamental de esta receta es la harina de almendras, un componente que presenta un perfil nutricional sumamente beneficioso. Esta harina solo presenta cuatro gramos de carbohidratos por ¼ de taza, reduciendo la ingesta de carbohidratos refinados, lo que ayuda a disminuir el nivel de azúcar en sangre. A la vez, este ingrediente destaca por su aporte de proteínas de origen vegetal, su cantidad de fibras, grasas saludables, calcio, hierro, fósforo, magnesio y zinc.
Preparar esta receta es más que sencillo. En tan solo tres pasos podemos tener listo este pan ideal para el desayuno. Una vez finalizado podemos agregar los ingredientes que queramos, ya sea para unas deliciosas tostadas o un rápido sandwich. Para elaborarlo solo necesitamos siete componentes.
¿Cómo preparar el pan sin harinas bajo en gluten?
¿Cómo preparar pan sin harinas?
Ingredientes
- 5 huevos
- 5 cucharadas de aceite de oliva (o manteca derretida o aceite de coco)
- 1 cucharada de miel
- 1 cucharadita de vinagre de manzana
- 1¾ tazas de harina de almendras, súper fina
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1/4 cucharadita de sal
Elaboración
1. Precalentamos el horno a 170 °C. Cubrimos un molde para pan con papel manteca.
2. En un bol grande, batimos ligeramente los huevos. Incorporamos el aceite, la miel y el vinagre de manzana (no debemos omitir el vinagre o el pan no levará correctamente) hasta que la mezcla quede homogénea. A continuación, añadimos la harina de almendras, el bicarbonato de sodio y la sal hasta que se incorporen y la masa quede uniforme y espesa. Transferimos la mezcla al molde y horneamos durante 30 a 35 minutos o hasta que la parte superior esté dorada.
3. Dejamos enfriar el pan durante 10 minutos, lo sacamos del molde y colocamos en una rejilla por 20 minutos. Córtamos en rebanadas y ya está listo para disfrutar, ya sea como pan de sándwich, tostada o con miel y manteca.
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