03 Noviembre 2024
Justo en la carrera que prometía ser la más especial desde su llegada a la Fórmula 1, Franco Colapinto tuvo un fin de semana para el olvido. El argentino debió abandonar el Gran Premio de Brasil, ante una gran cantidad de fanáticos "albicelestes", tras un fuerte accidente en la vuelta 32.
Pese a una clasificación complicada, donde tuvo un accidente que lo dejó afuera en Q1, el piloto de Williams tuvo un buen arranque en el circuito de Interlagos. Sin embargo, todo terminó mal, con un impactante choque que lo sacó de carrera
En la largada, el argentino exhibió su habilidad, y ganó cuatro puestos, para ubicarse 12°. Entre ese lugar y el 14° fue alternando durante el primer tramo de la carrera, hasta que entró a boxes en la vuelta 27, para cambiar los neumáticos. Allí, cayó al 16°.
En esa ubicación, sólo por delante del chino Guanyu Zhou (tres pilotos ya habían abandonado), marchaba el argentino cuando tuvo el accidente que lo obligó a abandonar. En la parte final del trazado, perdió el control del vehículo, chocó contra el paredón y siguió, con una fuerte rotura en el costado izquierdo.
El incidente obligó a que se instalara la bandera roja, y se detuviera la carrera por unos minutos. “Estoy bien”, alcanzó a decir por radio el argentino, que fue víctima de las complicadas condiciones climáticas, con una intensa lluvia.
Colapinto, desconsolado tras el accidente que lo dejó afuera del Gran Premio de Brasil: “Perdón al equipo”
No fue el fin de semana esperado para Franco Colapinto. En su sexta carrera en la Fórmula 1, en el Gran Premio de San Pablo, y ante una multitud de argentinos, el nacido en Pilar tuvo un fuerte accidente, producto de la intensa lluvia, y debió abandonar la carrera en la vuelta 32, algo que lo dejó desconsolado.
“Fue un golpe muy fuerte, la verdad que el auto se destrozó. Estoy muy triste, perdón al equipo que trabajaron un montón para poner el auto en pista, y tuve otro accidente. Una pena”, expresó Colapinto, que ya en la clasificación, más temprano, había tenido otro choque.
“Entramos a boxes y pusimos gomas intermedias otra vez. Estaba muy mojada la pista, y para mantener las gomas con temperatura tratamos de empujar, de dar lo máximo que podía”, sostuvo el argentino, explicando la estrategia que adoptó instantes antes del accidente. “Día malo, complicado”, agregó el piloto de Williams, que anticipó que volverá “más fuerte” en la próxima carrera, que será el Gran Premio de Las Vegas, a fin de mes.
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