03 Noviembre 2024
REEDICIÓN
LOS POSTIGOS VERDES
GEORGES SIMENON
(Anagrama/Acantilado – Barcelona)
La reedición de la vasta obra de Georges Simenon es digna de ser celebrada. Incluso a despecho de la mesa chica de los intelectuales propietarios del buen gusto que despreciaron la siembra del belga en cuestión, cuando no la evaluaron con singular acritud o tomaron la gratuita salida de ignorarla. Eso que en jerga de estos tiempos, se denominaría con la palabra “ninguneo”.
Humildemente, el autor de estas líneas considera que a Simenon (Lieja, 1903/ Lausana, 1989) se lo puede leer con fruición, o interpelarlo, o en todo caso juzgar que ha quedado lejos del olimpo de los colosos de la literatura, pero de ningún modo serían plausibles la omisión o la supresión de alguien que lanzó al ruedo 219 novelas (27 de ellas rubricadas con seudónimos), traducido en 55 lenguas y tomado como fuente de inspiración de medio centenar de películas. De forma deliberada dejamos para el final la impactante cifra de 500 millones de libros vendidos, en el entendimiento de que la valía de un escritor excede la eventualidad del éxito comercial.
Como bien saben tirios y troyanos, el punto fuerte de Simenon estribó en el Comisario Maigret, al que dedicó más de 40 años de una producción de sobreentendido alter ego: en su agitada adolescencia laboró como periodista de la página de policiales. En esa etapa de cronista precoz asumió el rol de entusiasta habitué de los bajos fondos. Exploró, para que sea dicho de una vez, noches y madrugadas en las que las nociones del bien y el mal rivalizan y cabalgan entre luces mortecinas, verdades a medias y tragedias.
Pero así como Simenon ha sido bastante más que el creador de su personaje fetiche, el ya referido Comisario Maigret, su vida propiamente dicha reunió visos novelescos. Un hombre supersticioso (abogó por una biografía que adelantara el día de su nacimiento y convirtiera el 13 en un 12), panadero, bibliotecario, humorista, navegante, trashumante, amante sin sosiego de mujeres de origen variopinto, cartógrafo de una París que hizo propia y al cabo, hacia sus 50 años, bon vivant de la Costa Azul; pero todo eso luego de agotar su fascinación por los Estados Unidos. Una década que se inicia en Connecticut y cobra singular intensidad en Arizona, Florida, California y, desde luego, la madre de todas las urbes: Nueva York.
El libro que propicia estas observaciones, amén de ostentar un título de sugerente belleza nos ofrece una de las versiones más sobrias en la babel de Simenon. Narra la historia de un actor con aureola de celebridad al que se le descubre una grave afección cardíaca. La latente presencia de la muerte opera en él como una herramienta de introspección en la que se presta a examinar y cuestionar desde lo más trascendente a lo más baladí. Es en ese trance donde adviene con singular vigor un frustrado sueño de su primera mujer: una sencilla casa de postigos verdes.
© LA GACETA
WATER VARGAS
Perfil
Georges Simenon escribió 192 novelas con su nombre, y unas tres decenas más de novelas y relatos publicados con pseudónimo, además de libros de memorias y textos dictados. El comisario Maigret es el protagonista de 72 de estas novelas y 31 relatos, todos ellos publicados entre 1931 y 1972. Célebre en el mundo entero, reconocido ya como un maestro, hoy nadie duda de que sea uno de los mayores escritores del siglo XX.
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