LA PAZ, Bolivia.- El ex presidente boliviano Evo Morales denunció que “hombres encapuchados” realizaron 14 disparos contra el vehículo en el que se trasladaba, e hirieron a su chofer. El presunto atentado se produjo cuando Morales se dirigía a la radio que emite su programa semanal, en Cochabamba, en el centro del país.
“Felizmente hoy día salvamos la vida”, expresó en entrevista con la radio Kawsachun Coca. “Esto estaba planificado, era para matar a Evo”, aseguró.
“Lucho (el presidente Luis Arce) ha destruido Bolivia y ahora quiere eliminar nuestro proceso acabando con la vida de Evo. Vamos a ver cómo nos preparamos (...). Está en marcha un estado de sitio”, afirmó Morales.
En un video difundido por Kawsachun Coca se observa que en el parabrisas de la camioneta en la que viaja Morales de copiloto hay tres orificios, a todas luces, de los disparos. El chofer tiene sangre en la cabeza y una mujer le pide que se “apresure”.
El ex mandatario es investigado por el presunto abuso a una menor con quien habría tenido una hija durante su mandato. La fiscalía anunció hace algunas semanas que emitiría una orden de aprehensión en su contra, pero no se ha pronunciado desde entonces. La causa llegó a la Justicia en 2020 y fue archivada.
Arce, blanco de las críticas de Morales, ordenó que se investigue el ataque y condenó el ejercicio de cualquier práctica violenta en la política. “No es con la búsqueda de muertos que se resuelven los problemas ni con especulaciones tendenciosas”, escribió el jefe de Estado en la red social X.
También informó que “ante la denuncia del ex presidente Morales de un presunto atentado contra su vida” instruyó “una inmediata y minuciosa investigación, para esclarecer este hecho”.
Protestas y malestar
Los partidarios de Morales, que exigen el “cese de la persecución judicial” contra su líder, han bloqueado importantes rutas del país desde el 14 de octubre y los acusan de causar pérdidas millonarias, escasez de combustible y alza de precios de productos básicos en distintas ciudades.
Mientras la crisis entre los dos ex aliados va montando volumen, el presidente Arce cambió sorpresivamente al mando militar, el sábado en la noche, e instó a los nuevos jefes a “garantizar el restablecimiento del orden público” frente a los bloqueos de rutas, que ya llevan 14 días.
“En la coyuntura actual, la sociedad nos demanda de manera imperativa al gobierno y a las fuerzas armadas a cumplir tareas y acciones con el fin de preservar los más altos intereses del país como la seguridad del Estado y el restablecimiento del orden público”, dijo Arce a la nueva cúpula militar.
Seguidores del ex presidente Morales mantienen bloqueadas vitales carreteras para impedir que el ex mandatario responda a la justicia, que le inició una investigación por supuesto abuso de una menor en 2016 cuando presidía el país.
El gobierno culpa a los bloqueos de haber dejado dejado desabastecidas a las ciudades de alimentos y combustibles lo que a su vez encendió otras protestas ciudadanas que exigen al gobierno acciones para despejar las rutas.
Un intento de desbloqueo, el viernes, dejó 14 heridos entre los policías y más de 40 detenidos en una carretera que conecta las regiones del oriente con el occidente donde está La Paz.
La policía movilizó cerca de 2.000 efectivos, pero los manifestantes repelieron a las fuerzas del orden con dinamita, indicó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.