Las batallas del periodismo

Las batallas del periodismo

Por Fernán Saguier.

Las batallas del periodismo
Hace 11 Hs

El periodismo hoy libra varias batallas simultáneas. Una es la lucha contra la desinformación en ese mar de incertezas que son las redes sociales. Cuando me preguntan cuál es hoy nuestra principal función, no dudo. Somos proveedores de certezas. Las marcas siguen siendo un gran activo por el rigor y la credibilidad que generan. Siguen marcando la agenda. O acaso, como se preguntó días atrás en una entrevista en La Nación, Marty Baron: “¿Alguien recuerda una gran primicia surgida de Twitter? No se debe claudicar en el esfuerzo frente a las redes, las grandes plataformas, la Inteligencia Artificial de perder el vínculo directo con los lectores.

Casi todo está cambiando desde que arrancó la revolución tecnológica pero no cambió lo esencial: la identidad. Hacer periodismo de calidad. En La Nación lo repetimos como un mantra: Investigación, análisis, reportar desde el lugar de los hechos. Después de toda esta revolución, ¿de dónde surgieron, por ejemplo, la causa de los cuadernos de las coimas? ¿O la foto de la fiesta clandestina en la residencia presidencial de Olivos? ¿O la denuncia de la ex primera dama contra Alberto Fernández? ¿O también del ojo con un moretón de Fabiola Yañez?

Hacer periodismo de calidad es costoso. Alguien tiene que pagar por él. En estos días Yuval Harari dijo “contar la verdad cuesta caro”. En los últimos dos años mandamos cinco veces enviados a Ucrania, cuatro veces a Medio Oriente y esta semana entrevistamos a Novak Djokovik en Belgrado. Las plataformas deben pagar precios justos por los contenidos de los medios que usan.

*Discurso pronunciado durante la 80 asamblea de la SIP.

Fernán Saguier  

Es licenciado en Psicología de la Universidad del Salvador. Desde 1983 trabaja en el diario La Nación, del que es director periodístico. Fue corresponsal en los Estados Unidos y México y luego secretario general de Redacción. Es miembro de número de la Academia Nacional de Periodismo.

Comentarios