Ahorrar tiempo y espacio suelen ser actividades a las que prestan atención las personas que cocinan. Por eso, muchas veces se utiliza el "truco" de poner a hervir en un mismo recipiente diferentes alimentos como huevos, papas y zanahorias. Sin embargo, esta práctica puede representar un peligro para la salud de quienes consuman esos alimentos.
Para evitar el contagio de enfermedades o el ingreso de bacterias al cuerpo, lo recomendable es utilizar diferentes ollas para hacer hervir los huevos. Estos alimentos, aunque de cocción rápida, muchas veces pueden estar contaminados externamente y transmitir microorganismos a los demás elementos que haya dentro del mismo contenedor.
Por qué no cocer huevos junto a otros alimentos
Siempre se debe prestar atención al estado de un huevo. Solo ver la suciedad que pueden contener sobre las cáscaras debería ser alarma suficiente para decidir no hervirlos junto a otras cosas que se consumirán. Aunque lavarlos puede parecer una solución, realmente nunca estaremos seguros de que todos los microorganismos hayan desaparecido.
Es que los huevos pueden contener materiales como heces, plumas, sangre y otros componentes que pueden pegarse en la puesta de la gallina. Si el animal estuviera enfermo, esa enfermedad podría transmitirse a los humanos al comer los demás alimentos contaminados.
Lavar los huevos tampoco es una buena idea porque la manipulación del alimento puede ayudar a transferir bacterias como la salmonella del exterior de la cáscara al interior. Este organismo es el causante de la salmonelosis, una enfermedad del tubo digestivo que suele causar diarreas severas.
Como aclara la Organización de Consumidores y Usuarios de España, aunque la cáscara es porosa, contiene una "fina capa de cutícula que la impermeabiliza e impode que los gérmens pase al interior". Sin embargo esta capa podría deshacerse con el lavado y dejar de funcionar como barrera.