Por Verónica Robles
17 Octubre 2024
El 47% de las jóvenes argentinas entre 18 y 24 años que no tiene hijos tampoco planea ser madre, según una encuesta de la consultora Voices y WIN. Este porcentaje es significativamente mayor que el promedio global del 30% y refleja un cambio profundo en las prioridades de las nuevas generaciones en el país.
El fenómeno del rechazo o la postergación de la maternidad se alinea con una tendencia mundial que hace que las mujeres opten por tener menos hijos y a edades más avanzadas. En la Argentina, la tasa de fecundidad pasó de 2,35 hijos por mujer en 2010 a 1,88 en 2022. Además, la edad promedio para tener el primer hijo sigue aumentando. Según datos de la Dirección Nacional de Población, en 2019 las mujeres entre 30 y 34 años concentraban la mayor tasa de nacimientos, algo que antes ocurría entre los 25 y 29 años.
¿Qué motiva a tantas jóvenes a reevaluar la maternidad? Por medio de un sondeo informal en redes sociales realizado por LA GACETA, ocho tucumanas compartieron su perspectiva.
"No es blanco o negro"
María Pía Gutiérrez, 22 años, estudiante de Psicopedagogía, desea ser madre, pero no sin antes construir su carrera profesional. "Siento que ser mujer, madre y profesional hoy conlleva una gran responsabilidad. Existe ese miedo impuesto por la sociedad de que, si me dedico a una carrera exitosa, quizás descuide la maternidad o viceversa. Pero creo que ambas cosas son posibles, aunque requiere mucho trabajo personal, no es blanco o negro", dijo.
María Pía contó que le gustaría considerar la posibilidad de tener hijos a los 28 años, una edad que, según sus cálculos, le permitiría priorizar su desarrollo personal y profesional.
"Mis proyectos no incluyen la maternidad"
Antonella Mirra, de 33 años, licenciada en Ciencias de la Comunicación, decidió hace una década no tener hijos. "No es algo que esté en mis planes de vida. Me gustan mis proyectos actuales sin hijos y no siento que ser madre sea esencial para lo que quiero lograr", explicó. Antonella tuvo que enfrentar la presión social: "me decían ‘ya se te va a pasar’ o ‘andá a terapia y lo vas a reconsiderar’, como si no ser madre fuera un problema a resolver, pero para mí no lo es".
Si en algún momento optara por la maternidad, Antonella dijo que se inclinaría por la adopción, dado que no desea pasar por un embarazo.
"No es compatible con mi estilo de vida"
Lucía Constanza Gattella, 28 años, fundadora de una academia de finanzas (@academia.luciafattella en Instagram) y estudiante de economía, tampoco planea tener hijos. "No está dentro de mis objetivos. Mi vida profesional requiere mucho tiempo porque viajo y trabajo constantemente. Tener hijos no es compatible con el estilo de vida que llevo", observó. Aunque recibió comentarios como "ya te van a dar ganas", Lucía acotó que no se siente presionada y que le interesan otros proyectos.
"Me gustaría, pero me preocupa el contexto"
María Luján Lobo, de 25 años, diseñadora de indumentaria y docente, sí quiere ser madre, pero le preocupa cómo hacerlo. "Quiero tener hijos, pero el contexto social, la inseguridad, y el equilibrio entre mi carrera y el tiempo de calidad con un hijo me hacen dudar. Quiero trabajar y crecer profesionalmente, pero también me preocupa que eso perjudique a mi familia", afirmó. Luján manifestó que le gustaría ser madre a los 32 años.
"No hasta lograr mis aspiraciones profesionales"
Para Florencia Eichele, de 21 años, estudiante avanzada de Ciencias de la Comunicación y profesora de Alemán, la maternidad no es una prioridad en este momento. "No quiero formar una familia hasta sentirme realizada profesionalmente. Hoy en día la mujer se está desarrollando de manera rápida y a veces dejamos de lado proyectos tradicionales, como tener hijos, sin sentirnos culpables por ello", refirió.
Florencia acotó que encontrar una pareja que comparta sus valores y tiempos para proyectar una familia también es un desafío que no está en su horizonte actual.
"No aportaría nada a mi vida"
Dolores Messina, de 20 años, estudiante de Arquitectura, tiene una postura firme sobre la maternidad. "No quiero tener hijos porque no aportarían nada significativo a mi vida. Criar un niño no es compatible con mis planes, incluso sería una inconveniencia", expresó. Desde joven ha estado segura de su decisión y, aunque no descarta un cambio en el futuro, no lo ve probable. "Conozco mujeres que encuentran realización en formar una familia, pero ese no es mi caso", reflexionó.
"Es necesario encontrar el equilibrio"
Melina Fiorella Navarrete, de 30 años y profesional en Recursos Humanos, quiere ser madre, pero reconoce las barreras laborales que muchas mujeres enfrentan. "Estamos en un contexto lleno de estereotipos. A los 30 años parece que ya deberíamos tener todo resuelto, y muchas veces nos hacen elegir entre ascender en el trabajo o ser madres", observó. Melina consideró que es posible equilibrar ambos aspectos, aunque reconoce que la presión social sigue siendo un desafío. En su caso, se proyecta en la maternidad a los 36 años.
"La estabilidad laboral me inquieta"
Finalmente, María de Lourdes Veliz Masmut, de 29 años y abogada, también desea ser madre antes de los 35, pero su preocupación está ligada a la inestabilidad laboral. "No podés traer un niño al mundo sin una base económica y afectiva sólida. Además, en mi trabajo actual hay mucha inestabilidad, lo que me frena a la hora de tomar la decisión. Dios proveerá", confió.
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