El zinc es uno de los nutrientes fundamentales para que nuestro cuerpo funcione correctamente. Este resulta esencial para nuestro sistema inmunológico y nuestro desempeño metabólico. La deficiencia en su consumo puede producirse en personas con trastornos gastrointestinales o que siguen dietas específicas como la vegetariana o vegana, lo que puede concluir en consecuencias graves para nuestra salud.
El zinc es un nutriente que desempeña un papel vital en las funciones corporales. Este es esencial para el desarrollo de nuestra piel y huesos, así como garantiza el correcto desempeño de nuestros sistemas digestivos, reproductivo, nervioso central e inmunológico. También juega un rol fundamental en la cicatrización de heridas.
¿Cuáles son los alimentos que son fuente de zinc?
Nuestro cuerpo no es capaz de producir este elemento químico, por lo que resulta significativo elegir alimentos que puedan proporcionar este nutriente. Entre las fuentes más ricas del mismo se encuentran los animales y mariscos, como las carnes rojas, aves, huevos y pescado. También se puede encontrar en vegetales, como hongos, col rizada, arvejas, espárragos y hojas de remolacha, legumbres, nueces, semillas y productos lácteos.
Los estudios muestran que la cantidad diaria recomendada de zinc es de unos ocho microgramos (mg) para las mujeres adultas y de 11 mg para los hombres adultos. Los niveles de zinc inferiores a esas cantidades suelen deberse a la desnutrición o a ciertas enfermedades. Según la especialista Samantha Dieras, rectora de Servicios de Nutrición Ambulatoria del Hospital Mount Sinai, esta afección puede producirse en personas con trastornos gastrointestinales, antecedentes de abuso de alcohol y en aquellas que se han sometido a una cirugía para perder peso. También puede ocurrir si se llevan a cabo regímenes de alimentación como las dietas vegetarianas o veganas o si se está cursando un embarazo o lactancia.
¿Cuáles sn los signos del déficit de zinc?
El riesgo de deficiencia de zinc es bastante grave y puede causar muchos problemas de salud si se ignora durante mucho tiempo. Cuando el cuerpo tiene un nivel bajo de zinc, puede tener dificultades para combatir virus y bacterias. Dieras agrega que puede afectar negativamente el apetito, disminuir la capacidad para saborear y oler, provocar muchos de los síntomas enumerados anteriormente, como pérdida excesiva de peso, e incluso causar diarrea. Otros efectos secundarios que enumera incluyen un retraso en la cicatrización de heridas, pérdida de memoria, letargo, problemas con el razonamiento mental y el estado de alerta, e incluso provocar una textura áspera en la piel y la caída del cabello .
La forma más óptima de contrarrestar el déficit es a través de la dieta y los suplementos de zinc. Priorizar comidas como proteínas animales, mariscos y la verduras que se enlistaron pueden ayudar a combatir esta falta del nutriente.