Hace 8 Hs
“La angustia que tiene el hincha es la misma que tenemos nosotros, yo en mi vida peleé el descenso. Yo no lo quiero ni para Tigre ni para mi carrera. Estamos hoy a cuatro puntos de salvarnos”, advirtió entre la semana Sebastián Domínguez, el técnico de Tigre, que esta tarde llegará a la provincia con la misión de llevarse algo de la cancha de Atlético Tucumán para recortar puntos en la pelea por el descenso.
Es que el “Matador” viene a los tumbos. Ganó apenas dos de los últimos ocho partidos. Esas dos victorias por 5-1 (Unión) y 2-0 (Huracán) que enlazó en la fecha 12 y 13 parecía que empezaba a encaminar la escalada en la tabla; sin embargo tras esos dos triunfos empató con Gimnasia e Independiente y perdió con Newell’s, eso lo hizo retroceder otra vez en la clasificación y el club otra vez se llenó de dudas.
Malos rendimientos propios y una seguidilla de cuatro triunfos consecutivos de Central Córdoba lo colocaron otra vez en zona de descenso directo y a cuatro puntos de Independiente Rivadavia y Sarmiento, por tabla general. Esto provocó que el técnico Domínguez vuelva a estar en la cuerda floja, pese a que en las últimas semanas recibió el apoyo de la “CD”.
“Tratamos de minimizar errores. El rival también juega y nos está tocando que todos sean efectivos. Para lo que corremos y nos desgastamos es para anular al otro equipo. Generar situaciones de gol o poner la pelota adentro del área es lo que trabajamos todos los días, pero si fuese tan fácil Tigre no estaría en esta situación. Seamos conscientes que venimos de una campaña de cinco puntos, seamos realistas. Cuando ganamos esta todo bien y si perdemos todo mal, para mí el análisis es más profundo”, enfatizó el técnico que está al frente del equipo desde hace 19 partidos.
El entrenador recibió miles de críticas a lo largo de su mandato en Tigre, es que apenas ganó cuatro partidos, perdió ocho y empató siete juegos. Números que tendrían en jaque a cualquier entrenador y Domínguez no es la excepción. Martín Suárez, presidente del “Matador” lo bancó públicamente tras el 0-1 frente a Newell’s, pero puertas adentro, desde el club de Buenos Aires admiten que esta visita a Tucumán es de riesgo para el cuerpo técnico, que desde hace varias semanas camina por la cuerda floja.
En la vereda del frente saben que Tigre saltará al campo muy condicionado por las tablas, por eso el entrenador Facundo Sava pondría el mismo equipo que en el empate con Argentinos, aunque se vería una versión más ofensiva. “Nosotros estuvimos de ese lado y es complicado planificar la semana y también jugar; es una presión extra complicada para cualquier jugador. Debemos aprovecharlo”, dicen desde el búnker de Atlético.
La clave del partido de mañana para Atlético estará en la mitad de la cancha. Si el “Decano” logra controlar a Florian Monzón, Gonzalo Maroni en el ataque; y corta los circuitos de juego que se inician en Agustín Cardozo, la mitad del trabajo estará realizado. Para que el planteo realmente sea efectivo deberá mejorar la puntería en los últimos metros.
Si el entrenador se inclina por el tridente compuesto por Mateo Bajamich, Marcelo Estigarribia y Franco Nicola, necesitará que el uruguayo esté enchufado como en los primeros partidos. El imperioso que alguno de los puntas se comprometa con la creación de juego. No es azaroso que ni Estigarribia ni Bajamich hayan tenido un mano a mano con el arquero rival en la cancha de Argentinos. El “Decano” tiene muchos problemas en la gestación de juego, sobre todo cuando Luis Miguel Rodríguez no está en la cancha.
Sava, como en cada partido, deberá planear una estrategia meticulosa para enfrentar al “Matador”. Por la movilidad de los volantes rivales sería arriesgado mandar a “Pulga” desde el inicio en lugar de Nicola, perder un elemento en la mitad pondría en jaque a la defensa, que sería la misma que viene de empatar en La Paternal, pero que allí, en el Diego Maradona, jugaron juntos por primera vez.
El “Decano” que ganó apenas un partido de los últimos cinco necesita de manera imperiosa reencontrarse con el triunfo si quiere seguir soñando con los puestos de copas internacionales.
Con 36 puntos, Atlético comenzó la fecha en el puesto 22 de la tabla general, a nueve puntos de la clasificación a Copa Sudamericana; y con 30 en juego no puede darse el lujo de seguir desperdiciando chances. El lunes tuvo una inmejorable, de descontarle puntos a Argentinos (el último que estaría ingresando a la Sudamericana); ahora jugará contra un rival que tiene otras urgencias, pero que venderá cara su derrota en Tucumán.
El plantel tucumano se entrenará hoy por la mañana en el estadio, en tanto a partir de las 20 quedarán concentrados en el hotel Sheraton a la espera del partido de mañana a las 21. Por su parte, los de Victoria tienen previsto arribar hoy a las 19 a Tucumán.
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