03 Octubre 2024
SEÑALES. El aislamiento, las ideas negativas y la desesperanza pueden ser signos de alerta del suicidio.
Las tragedias vienen sacudiendo a los vecinos de Bella Vista desde hace unas semanas. En la página de Facebook donde se publican los obituarios de la ciudad abundan las fotos de adolescentes, también comentarios que reflejan la gran preocupación de los habitantes del lugar. “Otro joven que se nos va. ¿Cuántos van ya?”, se preguntó Martín. “Lamento no haber sabido que atravesabas por momentos de soledad y tristeza amigo. Lo siento mucho”, agrega otro forista.
“Por Dios, qué está pasando en Bella Vista con los adolescentes, qué pasa con los gabinetes educativos que no se dan cuenta que necesitan mucha contención los jóvenes. Por favor no la dejemos sola a la juventud, nos necesita con una palabra de aliento, creer en ella, y no tantos reproches”, expresó Fabián. Marcela se quejó también en las redes sociales, por la falta de psiquiatras en el hospital de esta localidad ubicada a 25 kilómetros al sudeste de la capital.
La preocupación es tan grande que la misma intendenta de la ciudad, Paula Quiles, y el concejal José María Medina confesaron que están desbordados por los casos de menores de edad que se quitan la vida.
“En Bella Vista hay una tasa muy alta de suicidio de chicos: en tres meses llevamos seis”, expuso Quiles. Y contó que el martes había recibido la noticia de otro caso. “Imaginen el nivel de alarma que tenemos. Necesitamos que se nos escuche”, apuntó.
Durante la entrevista en el programa “Buen día”, de LA GACETA Play, la intendenta describió que es grave la situación de salud mental a la que se enfrentan los vecinos. Por ello, manifestó su descontento con la actual dirección del hospital de la ciudad.
“Estamos en una situación muy compleja, en la que varios chicos están tomando la decisión de quitarse la vida”, insistió Quiles. Y añadió: “comenzamos la gestión solicitando que se nombrara un psiquiatra. Al que teníamos lo perdimos después de la pandemia, ya que por problemas de salud tuvo que trasladarse a otro lugar. Desde entonces los inconvenientes han crecido tanto en la calidad como en la cantidad de servicios”.
“Nosotros, como municipio, miles de veces nos pusimos a disposición del hospital para contratar profesionales si era necesario. Estoy lejos de querer hacer de esto una cuestión política, partidaria o personal porque se trata de una problemática de salud pública”, sostuvo. Y dijo que esperaba que el gobernador Osvaldo Jaldo interviniera para frenar la crisis que había en Bella Vista.
“Se necesita una decisión urgente por parte del gobernador”, aseguró. “No quiero seguir llegando tarde; necesitamos accionar ahora para no seguir lamentándonos por las pérdidas en nuestra ciudad”, concluyó.
Guardias de psicología
Consultada sobre lo que ocurre en Bella Vista, Irma Thomas, la referente provincial del Programa de Prevención y Abordaje de Conductas de Riesgo de la Dirección de Salud Mental y Adicciones, señaló que están trabajando para poner guardias de psicología en el hospital de esa localidad.
En general, en toda la provincia se han incrementaron los servicios y las consultas de salud mental en los últimos años. Para tener una idea, en la línea 135 para asistencia y prevención del riesgo suicida, las llamadas se duplicaron el año pasado. Están atendiendo de 600 a 700 llamadas por mes, lo que da un promedio de más de 20 por día.
Según explicó Thomas, los suicidios son siempre multicausales. Y luego explicó que la mayoría de los que hoy se quitan la vida son jóvenes de entre 20 y 29 años. “Los problemas laborales, la falta de oportunidades, la autoexigencia, los problemas para encontrar un proyecto de vida, todo esto está afectando mucho a los jóvenes de esa edad”, enumeró.
Asimismo, habló de la influencia de las redes sociales y del acoso que sufren algunos adolescentes en estas plataformas como factores de riesgo de la conducta suicida. También la profesional alertó sobre un incremento de casos de suicidios e intentos entre jóvenes con adicción al juego. Asimismo, advirtió que el bullying y el consumo de drogas suelen aparecer en muchos casos como factores que influyen para tomar la decisión de quitarse la vida.
Thomas contó que incluso hay casos de niños con tentativas de suicidios. La mejor prevención es hablar, consideró. Dijo que es necesario ayudar a las personas que están atravesando alguna crisis y ofrecerles una escucha empática. Además, remarcó que en distintas partes del interior de la provincia se realizan cursos para capacitar a preventores, que estén atentos para detectar cuando hay un riesgo de suicidio.
Estadísticas
A nivel nacional, la cantidad de muertes por suicidio se incrementaron un 5% en el último año, de acuerdo a las estadísticas del Ministerio de Seguridad. En la actualidad, ya hay más fallecimientos por esta causa que por accidentes de tránsito o por homicidios. El suicidio es la segunda causa de muerte por causas violentas en chicos de 10 a 19 años.
Según el informe, la tasa nacional de suicidios (casos cada 100.000 habitantes) es 9,8. Por encima de esa tasa hay 15 jurisdicciones, entre las que se encuentra Tucumán (12,6).
No obstante, Thomas aclaró que esas no son las mismas cifras que maneja el Sistema Provincial de Salud, las cuales muestran una caída en los índices provinciales. Según señaló la última medición indica que la tasa de suicidios local es de 9,1. En 2018 alcanzó su pico máximo: 11,9 y en 2020 fue de 9,2.
Si miramos dos décadas atrás, estos hechos se multiplicaron. En 2001, por ejemplo, la tasa era de 4,2 suicidios cada 100.000 habitantes.
Señales de alerta: dónde se puede pedir ayuda
Hay algunas señales a las que debemos estar atentos para prevenir que ocurra un suicidio de un ser querido. Según el Ministerio de Salud, los signos de alerta son: aislamiento, persistencia de ideas negativas, dificultad para comer, dormir y trabajar, desesperanza, llanto inconsolable y repentinos cambios de conducta. En Tucumán se puede pedir ayuda llamando a la línea 135, que es atención para la conducta de riesgo suicida. Está disponible las 24 horas y cuenta con profesionales especialmente capacitados para contener este tipo de situaciones. La otra opción es concurrir a las guardias de salud mental que funcionan en estos hospitales: Padilla, Centro de Salud, Avellaneda, Monteros, Obarrio, Del Carmen y Tafí del Valle.
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