La economía del conocimiento mueve el mundo. Es la más regional de las economías. Es la llave para el desarrollo de las ciudades. Es la oportunidad de crecer, de tener más empleo y de disminuir los altos porcentajes de pobreza que tenemos hoy.
Estos y otros conceptos se presentaron durante la 1° Expo de Economía del Conocimiento (Expocon), evento que se realiza en Tucumán durante hoy y mañana, organizada por el Gobierno de la Provincia, a través del Instituto de Desarrollo Productivo (IDEP), en conjunto con Argencon -institución nacional que nuclea a las principales empresas de Economía del Conocimiento- y el Consejo Federal de Inversiones (CFI).
La muestra, que se desarrolla en el Hotel Sheraton (Avenida Soldati y Haití), es libre gratuita. Ofrece stands en los cuales más de 50 empresas tucumanas exhiben sus productos y servicios profesionales de diversos rubros como el software, la biotecnología, la producción audiovisual, el desarrollo de videojuegos y la robótica. Además, cuenta con presencia de empresas internacionales.
Durante la primera charla que se dictó hoy, “La Economía del Conocimiento. Panorama Global y Local”, los visitantes pudieron escuchar a especialistas de la industria.
Expocon: "La economía del conocimiento trajo nuevas reglas de juego"
El primero en hablar fue Luis Galeazzi, director ejecutivo de Argencon. Destacó cómo, a raíz de la pandemia, la tecnología, que ya jugaba un rol fundamental en la vida diaria cobró una importancia central en la vida de las personas. En ese contexto, el término economía del conocimiento se fue haciendo cada vez más importante.
“La economía del conocimiento trajo nuevas reglas de juego. El valor es ahora el capital intelectual, hay una deslocalización del trabajo que se puede hacer desde cualquier lugar, hay un acceso masivo a las bases del conocimiento. Esta es una rueda que se acelera. Los mercados son globales. Le podés vender al mundo. Tenemos que entender esta realidad y adaptarnos”, resaltó.
“La economía del conocimiento tiene capacidad de producir educación, empleo y salarios de alto nivel en dólares. Esto puede generar empleo masivo. Somos en Argentina una fábrica de empleo exportable. Y esto favorece el desarrollo federal porque se hace en cualquier parte del país; es la más regional de las economías”, señaló.
No obstante, dijo que tenemos mucho para mejorar, crear mucho más a partir de la economía del conocimiento porque de alguna forma aunque crecimos mucho estamos algo estancados. El desafío es repotenciar la capacidad de creación. Y también ver que haya una evolución del empleo porque muchos no están en el sistema formal. “Estamos en un momento de definición y en esto hay que ver bien cómo regulamos. Es un peligro regular mal la inteligencia artificial. Europa reguló mal y las empresas se van. No hay que burocratizar; hay que liberar, permitir que crezca, aseguró”.
En segundo lugar habló el doctor en Economía, Martín Rapetti, quien destacó las cinco dimensiones de la economía del conocimiento: desarrollo económico, productividad, exportaciones, empleo y sustentabilidad. Siempre lo destacado es que es algo federal.
Economía del conocimiento: "El mundo va camino al comercio de servicios basados en conocimiento"
“El mundo va camino al comercio de servicios basados en conocimientos”, explicó. También dijo que esto tendrá un impacto y habrá un crecimiento cada vez mayor de las ciudades intermedias, no de las grandes ciudades. “Las ciudades que ganan la carrera de atraer industria del conocimiento ven mejoras en producción, innovación, exportaciones, empleo y salario”, resaltó. Los beneficios serán económicos y también sociales: favorece el desarrollo económico y ayuda a reducir la pobreza.
A su turno, Camila Alanis, psicóloga social y coordinadora de Ciudades del Conocimiento, destacó la importancia de pensar globalmente pero actuar localmente.
¿Cómo crece una ciudad desde el conocimiento?, planteó. Y luego describió: generando oportunidades en el desarrollo de talentos para las habilidades requeridas por las nuevas economías, mejorando la infraestructura tecnológica para que las personas puedan tener un plan de vida en su ciudad, brindando oportunidades de formación y trabajo, generando competitividad, entre otros puntos fundamentales. El rol del gobierno local es promoviendo, facilitando las oportunidades.
Finalmente, Maximiliano Martínez Márquez, director ejecutivo del IDEP, explicó qué hizo Tucumán en lo referido a economía del conocimiento. “Hemos diseñado un plan estratégico. Queremos que Tucumán en los próximos 10 años sea un referente por servicios exportables de economía del conocimiento. Esto es un gran desafío. Cuando empezamos a trabajar ese plan estratégico nos dimos cuenta que, a medida que íbamos hablando con las cámaras empresariales tanto de biotecnología, software, videojuego, audiovisual y robótica, (que son los cinco ejes de abordaje que hoy tenemos con planes estratégicos predefinidos), que cada sector tiene una realidad completamente diferente a la otra", detalló.
Como una de las primeras medidas se promulgó la ley de beneficios a la empresa, que brinda beneficios fiscales hasta el año 2050 a todas las empresas de economía del conocimiento, no solamente a las presentes sino también a las que vienen a invertir.
"Queremos fomentar la exportación, la generación de empleo de calidad y la formación de talento. La formación de talento es principalmente el gran desafío que hoy tenemos. también estamos trabajando con las universidades que es el segundo principal valor que hoy tiene Tucumán, las universidades públicas y privadas, la calidad de los profesionales que egresan y los centros de investigación, de ahí es donde sale gran parte, la totalidad de la materia prima que hoy hace diferente a Tucumán, los empresarios también tienen un rol clave en esto”, cerró Martínez Márquez.