18 Septiembre 2024
El papel de un manager en un club de fútbol ha evolucionado para incluir múltiples responsabilidades que van mucho más allá de los aspectos administrativos, de hecho en ese rol casi nada es burocrático y casi todo pasa por la interacción personal entre las diferentes partes. De hecho, en algunos clubes, como en Atlético Tucumán ya ni siquiera se utiliza el título de “manager” como una figura activa.
En el caso de Sebastián Longo, tras una salida abrupta en junio del 2023 (cuando se desempeñaba como Director Deportivo de Atlético) hace unos meses volvió a trabajar en el “Decano”, aunque sin el título de Director Deportivo, ni de mánager. Más bien, el mendocino es la pieza visible -y radicada en Tucumán- de la nueva Secretaría Técnica, encabezada por Miguel Abbondándolo; quien trajo a Longo al club como jugador y luego le había dado la posibilidad de ser Director Deportivo, cuando Lucas Pusineri todavía era el entrenador.
Entre las actividades que desarrolla Longo en Atlético, una de las más destacadas es la función de nexo entre los dirigentes, el cuerpo técnico y los jugadores, su rol implica mantener un delicado equilibrio y fluida comunicación entre todas las áreas que componen el club.
A partir de allí, Longo, por ejemplo, debe garantizar que las decisiones que toma la Secretaría Técnica, en cuanto a estrategias deportivas y fichajes, lleguen de manera clara y precisa tanto a los directivos como al cuerpo técnico. Esta coordinación es vital para alinear los objetivos del club en torno a un plan común y asegurar que los dirigentes estén al tanto de los avances y necesidades del equipo.
Por este motivo, se puede concluir en que la comunicación es la clave en el puesto de Longo; ya que es importante que tenga un ida y vuelta fluido con los jugadores, tanto para resolver problemas individuales como también algunas situaciones grupales. Esta interacción diaria implica resolver inquietudes sobre contratos o incluso escuchar problemas personales que puedan afectar el rendimiento en la cancha.
Otra función crucial es la planificación de las actividades diarias del equipo. Desde los entrenamientos hasta los desplazamientos para partidos fuera de casa, desde su función debe supervisar cada detalle para garantizar que el equipo pueda concentrarse únicamente en su rendimiento deportivo. En este sentido, Sebastián Longo sería responsable de coordinar viajes, estadías y logística para que no haya interrupciones en el calendario deportivo.
En su puesto, no tiene injerencia en lo que tiene que ver con la contratación de jugadores, ya que esa tarea es realizada por el propio Abbondándolo, en concordancia con lo que solicita Facundo Sava. Longo, en su rol, tiene la capacidad de facilitar este proceso, manejando tanto los aspectos burocráticos como las relaciones interpersonales para cerrar acuerdos beneficiosos para todas las partes.
La supervisión del estado psicológico de los jugadores es otra de las tareas en las que se encuentra comprometido. Al lidiar muchas con situaciones personales que pueden afectar el rendimiento de un jugador, su figura es clave para poder resolver esas cuestiones individuales que muchas veces queda en la intimidad del vestuario.
“Es el primero en llegar y el último en irse, tanto en Tucumán como cuando le toca jugar de visitante, con su presencia en el día a día buscamos que los jugadores y el cuerpo técnico se sientan contenidos. ‘Seba’ fue compañero de varios jugadores, entonces hay una conexión muy buena con el plantel y con la gente, porque es muy querido por los hinchas por lo que hizo como jugador. Yo valoro mucho lo humano y él es una persona buena y trabajadora”, remarcó Abbondándolo.
Longo, como ex jugador e integrante de la Secretaría Técnica; también es una representación institucional del club. De esta manera puede asistir a reuniones con otras instituciones deportivas, ligas en nombre del club. O, también, como sucedió en el último partido que el “Decano” jugó como local, puede participar de la entrega de algún reconocimiento en la previa de algún partido. En el caso del juego con Racing, fue Matías Orihuela el que recibió un cuadro por haber llegado a los 100 partidos y “Seba” Longo, una persona muy querida en el mundo “Decano”, fue uno de los encargados de entregarle el presente al futbolista.
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