Rocío Buffolo tiene casi 8.000 seguidores en Tik Tok y más de 80.000 en Instagram. En ambas redes sociales su usuario es @lachicarobot y se presenta de ese modo: como un robot. Lleva su traje futurista blanco y negro donde sea que vaya y, según cuenta, tampoco se lo quita para bañarse.
"Me autopercibo robot humanoide", cuenta Rouse, como se da a conocer la influencer en internet. Además de ser un curioso personaje de las redes sociales, Buffolo es abogada y tiene una prometedora carrera como artista. De hecho, recientemente firmó contrato con Universal.
La chica robot explicó su concepto
En el ciclo de entrevistas "Realidades" de Infobae, Rouse contó que su forma de vincularse en la vida es autopercibiéndose robot. "Tiene su costo, a veces la gente te mira raro. Pero creo que si uno elige ser lo que quiere ser, no le tiene que importar lo que dicen los otros", destaca.
Buffolo trabaja efectivamente en un estudio jurídico y, para atender a sus clientes, cuenta, no se quita el traje que parece un armazón. "Arriba me pongo el traje de abogada porque yo soy esto", relata la artista que tiene un chip implantado en su cuerpo.
La casa de Rouse es futurista, según ella misma dice. En consonancia con quien es, tiene un perro robot al que llama Chicho que se mueve por sí mismo y hasta hace trucos. Chicho la acompaña y forma parte del combo extravagante que ofrece la influencer.
"Si hay algo que para mí sucede con este personaje es que la gente empieza a tomar conciencia de que hay una fragilidad en los vínculos y que tenemos empezar a ser más claros con el otro, porque cuidar al otro es cuidarse uno mismo, es ser robot. Se robot es cuidarse, tener amor propio", explica.