En el marco de la cooperación por el clima que hay entre San Miguel de Tucumán y Erfurt, una delegación alemana visitó Overo Pozo en 2022. En ese momento, los especialistas habían advertido sobre la falta de adecuada evaporación de los lixiviados (líquidos que se generan y circulan entre los residuos). Por ese motivo, con fondos de Engagement Global la comitiva alemana contrató a especialistas locales, que viajaron a Tucumán para elaborar un informe y propuestas de remediación sobre cómo se podrían tratar los lixiviados en el vertedero, como una planta de depuración.
Ese informe, que ahora fue traducido y entregado a la delegación tucumana que participa de un intercambio en Erfurt, precisa que se podría instalar una planta de tratamiento con humedales artificiales y aplicar tecnología para mejorar la utilidad del agua. “El gas del vertedero se libera a través de tuberías, siendo visibles grietas notables en el suelo”, relató Julia Huhnholz, ex coordinadora de Clima de Erfurt que visitó en 2022 el predio de Overo Pozo.
El documento es firmado por el especialista Michael Blumberg, y data de noviembre de 2022. “En el marco de la visita y las conversaciones mantenidas en el vertedero de Tucumán, los operadores nos informaron que el vertedero funciona desde 2009 en una superficie aproximada de 33 hectáreas y seguirá funcionando en la misma superficie durante otros cinco años. En los alrededores del vertedero hay 30 pozos de lixiviados, 20 de los cuales están actualmente en funcionamiento”, se lee.
Según relataron, el 60% de estos lixiviados se transporta en verano directamente al cuerpo del vertedero en pequeños contenedores para su evaporación y se pulveriza sobre toda la superficie. “La cantidad en verano se estimó en unos 120 m³/día. Este tipo de pulverización suele funcionar durante nueve meses (de marzo a noviembre). En caso de lluvia, se espera que el agua que se filtra mediante el cuerpo del vertedero llegue a los pozos de lixiviados en un plazo de tres días. En ese caso, el número de viajes de los contenedores se duplica. A continuación, los lixiviados son conducidos mediante contenedores o con ayuda de una bomba móvil a los cinco estanques de evaporación, denominados piletas de evaporación”, se enfatizó en el estudio.
Se cuenta allí, además, que los responsables de operaciones de Overo Pozo plantearon como objetivo principal mejorar el tratamiento de los lixiviados del vertedero, aumentando la superficie de las piletas de evaporación, minimizando el espacio necesario y los costos de construcción. “Se nos preguntó si las aguas residuales pretratadas también podían utilizarse para regar las vías de circulación operativas (con el fin de reducir las emisiones de polvo), a lo que respondimos afirmativamente, siempre y cuando sea posible descartar que se produzca una infiltración mayor a 5 cm y no se esperen precipitaciones que puedan ocasionar filtraciones más profundas”, se advirtió.
“Los valores medios indicados para Tucumán se superan significativamente en algunos casos”, alertaron los alemanes, en comparación con el vertedero que ellos tienen en Erfurt. Pusieron como comparación la Demanda Química de Oxígeno del agua (DQO). “Por ejemplo, el valor medio de DQO obtenido a partir de cuatro análisis de los estanques de evaporación dos a cinco es de 20.800 mg O2/l. En el estudio alemán, es de 727 mg O2/l. Se observan coeficientes similares con respecto a la DBO5. El valor medio de las cuatro plantas de 2021 es de 12.605 mg/l; la media de las plantas alemanas es de 58 mg/l. En cuanto a la conductividad eléctrica, el valor medio de los cuatro análisis de estanques en Tucumán fue de 28.566 µS/cm, mientras que la media alemana fue de 975 µS/cm. El valor medio de sulfatos es de 2580 mg/litro, frente al valor medio alemán de 75 mg/litro. Algunos parámetros de los protocolos de laboratorio no son plausibles, por ejemplo, el análisis del 12 de marzo de 2021 del estanque de lixiviado 5, según el cual el amonio-N es de 607 mg/l, mientras que el valor de nitrógeno total es de solo 500 mg/l”, se detalló.
“Entendemos que estas anomalías significan que, por un lado, el riego de retorno continuo que se produce en Tucumán durante la circulación repetida de los lixiviados a través del cuerpo del vertedero degrada indudablemente la demanda biológica de oxígeno fácilmente degradable (efecto de filtro de goteo), mientras que, por otro lado, se liberan compuestos de carbono orgánico del material de depósito fresco, lo que compensa en exceso el efecto de degradación, provocando el aumento significativo de las concentraciones en Tucumán”, destaca el documento.
De no corregirse estos valores, sostiene este informe elaborado por expertos de Alemania, podría haber complicaciones cuando se disponga el cierre del predio de disposición final de Overo Pozo. “Esto también será desfavorable para las posteriores medidas de tratamiento de los lixiviados en la fase de cierre prevista en un futuro cercano, dado que la demanda biológica de oxígeno (DBO) disminuirá continuamente, pero las sustancias refractarias (difíciles de degradar) se reducirán en menor medida (DQO) y, por lo tanto, la relación DBO/DQO será cada vez más desfavorable para un eventual tratamiento biológico posterior”, se concluyó.
Contenido de sal
Hubo también otras observaciones planteadas. “En los vertederos de residuos urbanos, las concentraciones de nitrógeno y materia orgánica tienen, sin duda, la mayor importancia. El contenido de sal es un factor relevante para la formación de incrustaciones en las tuberías de lixiviados y al utilizar plantas de ósmosis inversa para el tratamiento de lixiviados. Sin embargo, las concentraciones extraordinariamente elevadas de electrolitos medidas en Tucumán dificultan enormemente la financiación posterior de las etapas de tratamiento y provocan un gran aumento de los costos operativos. Por lo tanto, la práctica actual de recirculación, aunque actualmente no existe alternativa, es muy problemática a medio y largo plazo”, se reforzó.
Finalmente, en los análisis realizados y puestos a disposición por la anterior gestión de Overo Pozo también se registraron casi todos los metales pesados.
En Tucumán: unas 1.500 toneladas diarias de basura
En el área metropolitana de nuestra provincia, los municipios de San Miguel de Tucumán, de Alderetes, de Banda del Río Salí, de Las Talitas, de Tafí Viejo y de Yerba Buena, además de algunas comunas y organismos públicos, depositan su basura en Overo Pozo. Se trata de un relleno sanitario, que se encuentra a alrededor de 50 kilómetros al noreste de la capital tucumana. Hasta allí llegan alrededor de 1.500 toneladas diarias de desechos, que previamente son sometidos a una separación básica en la planta de San Felipe.