La gran campaña de Atlético en este segundo semestre del año le permite soñar con conseguir grandes objetivos. Pero las buenas noticias no se limitan sólo a los resultados; por estos días, hay que sumarle el regreso de Lucas Ambrogio. El delantero, que llegó al club a principios de año, sufrió la ruptura de ligamentos cruzados anteriores de la rodilla izquierda en su segundo partido con el club, ante Instituto en Córdoba, el 30 de enero. Después de meses duros, el nacido en Villa Mercedes, San Luis, está muy cerca de volver al ruedo.
“Estoy tranquilo. En realidad son ocho meses de recuperación, pero vuelvo antes porque me siento bien, así que ya me voy largando a entrenar con el grupo”, le contó Ambrogio a LA GACETA. El delantero, que llegó a préstamo desde Argentinos Juniors, recibirá el alta médica en las próximas semanas, pero ya se encuentra realizando una especie de pretemporada para ir recuperando ritmo.
“Los primeros meses hice la rehabilitación con gente de Buenos Aires, quienes me hicieron seguimiento todo el tiempo que estuve parado. Ahora, en este último tiempo, me ha seguido Pato (Peralta, kinesiólogo del club), que me ayudó bastante, y la preparación la está haciendo ‘Chiqui’ (Claudio Pérez, el preparador físico), para volver a agarrar el ritmo que necesito”, detalló Ambrogio, sobre sus meses de recuperación.
Aunque le tocó ver toda la temporada de afuera, el puntano aseguró que este tiempo le sirvió de gran aprendizaje. “Aprendes mucho en este proceso, donde no te toca entrenar ni compartir con tus compañeros. Trabajas mucho la mentalidad, y las ganas de volver a estar mejor que antes. Mejoré mucho en otros aspectos de mi vida que me hicieron mejor para desviar el foco, y que sea todo más llevadero”, analizó.
También fue importante no estar sólo; “vivo con mi novia Agostina, que es la que siempre me apoyó desde el día uno, y la que me acompaña siempre. Obvio que la familia está lejos, pero siempre presente conmigo en todo”, remarcó.
Con la etapa de recuperación ya casi en el olvido, Ambrogio le apunta con todo al tramo final del torneo, donde espera aportar lo suyo para que Atlético siga en lo más alto. “Me toca volver en una etapa del campeonato en la que el equipo está bien, así que mi foco está en competir para poder meterme en los concentrados y volver a jugar lo antes posible”, subrayó.
El delantero destacó el nivel del equipo, y admitió que siempre hay un plus a la hora de enfrentar a un equipo grande; ese mismo plus que buscarán tener la próxima semana, cuando visiten a River. “Estamos para pelear con todos, y lo estamos demostrando en la cancha. Cuando son equipos grandes tenés esa motivación extra de querer ganarles. Sumar con River es importante para seguir prendidos ahí arriba, cosa que nos acerca más al objetivo que todos buscamos que es clasificar a una copa, y pelear el campeonato”, apuntaló Ambrogio, quien también elogió a la hinchada del “Decano”. “Me sorprendió mucho cómo alientan y llenan la cancha cada vez que toca jugar de local. Es una motivación extra jugar en casa, me pone contento ver a la gente feliz “, consignó.
El puntano, que confiesa estar aprendiendo a tocar la guitarra en sus tiempos libres –“Me gusta tocar folclore y rock, así que trato de meterle a las dos jaja”-, también comento la importancia que tuvo la llegada de Luis “Pulga” Rodríguez al equipo. “Le dio otra energía al grupo, al igual que los refuerzos que llegaron. Él y el “Bebe” Acosta son grandes líderes que apoyan y tiran siempre para adelante, con buena energía, y corrigen y apoyan a los que lo necesitan”, destacó.
Aunque algunos hinchas prefieren tomarlo con calma, gran parte de la comunidad “Decana” tiene grandes expectativas por la actualidad del equipo. Y Ambrogio, lejos de bajar la espuma, también se ilusiona. “Seguro que hay para ilusionarse. Nos preparamos día a día para cometer la menor cantidad de errores posibles y seguir peleando arriba. El grupo está fuerte y es muy competitivo, así que no dudo que vamos a llegar lejos y pelear por todo”, aseguró el delantero, que cuenta los días para volver a ponerse la celeste y blanca, y saltar al campo de juego.
(Producción periodística: Carlos Oardi.)