Después de una serie de allanamientos que realizó la Policía, los sospechosos no sólo se entregaron, sino que los investigadores sumaron importantes indicios para esclarecer el asalto que sufrió un policía que terminó herido y en el que perdió la vida uno de los autores del robo.
El lunes, pasadas las 22, el cabo Lucas Copertino fue alcanzado por cuatro motochorros (no eran dos como se creía) en Congreso al 2.200. Los asaltantes lo amenazaron con armas de fuego para que le entregara sus pertenencias y la motocicleta en la que se trasladaba el efectivo. Al identificarse como policía, se registró un feroz tiroteo.
El efectivo recibió un disparo en la espalda y “Honguito”, uno de los asaltantes de 15 años, en el cuello que le provocó la muerte casi en el acto. Días después, la familia informó que los delincuentes podrían haber robado una mochila donde la víctima del robo tenía tarjetas de crédito, las identificaciones que le entrega la fuerza y alguna prenda de vestir.
Personal de Homicidios y de la seccional 4a, al mando de los comisarios Susana Monteros, Juana Estequiño, Guillermo del Lugo y César Paz, recibieron información de quiénes podrían ser los autores del hecho. Después de identificarlos, realizaron varios allanamientos por diferentes barrios de San Cayetano en búsqueda de tres sospechosos. La presencia policial en la zona generó malestar entre los vecinos y esa fue una de las razones por las que varios de ellos decidieron colaborar con los pesquisas.
Las casas allanadas eran de allegados y de parientes políticos de los acusados. Sus propietarios señalaron que los habían corrido de allí luego de que se enteraran que podrían haber estado involucrado en el robo en contra del Policía. Mientras se realizaban las medidas, los hermanos Dilan Brando y Jon Eduardo Beltrán decidieron entregarse a cambio de que se garantizara su seguridad. Al cierre de esta edición, los policías estaban tras los pasos del tercer sospechoso.
En los allanamientos, según confiaron fuentes policiales y judiciales, los pesquisas encontraron importantes pruebas en contra de los señalados. Entre otros elementos, secuestraron la placa y credencial de policía, tarjetas de créditos y una remera. El fiscal Pedro Gallo convalidó la aprehensión y en las próximas horas se realizará la audiencia en su contra.
Mientras tanto, el cabo Lucas Copertino continúa internado en el hospital Padilla. Los médicos todavía no pueden extraerle el proyectil que quedó alojado cerca de la columna y por lo que perdió sensibilidad y movilidad en sus piernas.