El nivel de juego, el sentido de pertenencia y una época dorada en la que la selección argentina logró cuatro títulos en tres años reavivó el amor entre el equipo de Lionel Scaloni y sus hinchas. Hoy todos quieren ver a la Selección y el duelo contra Chile disparó mil y una historias sobre fanáticos que decidieron hacer cualquier cosa con tal de estar presentes en el estadio de River.
Leonardo Sadir, Patricio Cipriani, Darío Vercellone y Ricardo Véliz son cuatro tucumanos que trabajan en la misma empresa (una embotelladora de cervezas que tiene su planta en Acheral) y ni bien Lionel Messi levantó la Copa América 2024 se juramentaron asistir al duelo contra Chile por las Eliminatorias.
"Somos muy futboleros. Dos somos hinchas de Atlético y dos de San Martín y siempre estamos hablando de fútbol. Por eso decidimos venir a este partido. Será el primer juego oficial de la Selección que vamos a ver, sólo habíamos estado contra Curazao en Santiago del Estero", le cuenta Sadir a LA GACETA.
No fue nada sencillo conseguir su lugar en el Más Monumental. Sadir fue el encargado de hacer la fila virtual para comprar los boletos. Luego de 45 minutos en línea, cuando llegó su turno ya no quedaban populares (las más baratas, que tenían un costo de $ 75.000); sin embargo, no se desanimó. "Me salió la chance de comprar las plateas San Martín alta, de $ 113.000, lo consulté con los chicos y decidimos darle para adelante. Son caras, pero lo valen", dice y va más allá. "Cuando mi esposa vio lo que costaban las entradas me dijo que estábamos locos. Pero bueno, era la gran oportunidad de ver a los campeones del mundo. Además, justo está la despedida de Di María y eso creo que le da un toque de emoción más. Dicen que a los gustos hay que dárselos en vida y acá estamos", agrega.
Con las entradas adquiridas, el grupo debió armar la logística del viaje; y a desembolsar más dinero, obvio. Sacaron los pasajes de avión, contrataron tres noches de hotel, y el martes a la noche volaron rumbo a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. "Trabajamos ayer y nos vinimos porque hoy era el último día de canje entradas. Como la empresa tiene oficinas operativas acá (en Buenos Aires), vamos a trabajar hasta el viernes. Eso nos facilitó para no tener que perder días de trabajo. Justo las oficinas quedan al frente de la cancha de River así que nos salió todo redondito", celebra "Leo", dejando en claro que el presupuesto infló demasiado. "Y... ver a la Selección no es nada barato. Creo que nosotros vamos a gastar alrededor de $ 500.000 sin contar las entradas".
Desde el título en el Hard Rock Stadium de Miami, los planetas se fueron alineando y Sadir, Vercellone, Cipriani y Véliz se darán el gusto de alentar a la Selección en vivo y en directo. Claro, no estará Messi en cancha por eso Sadir golpe su puño derecho contra la palma izquierda. "Esa es la nota negativa, pero bueno... ya habrá oportunidad de verlo", avisa.
"Nosotros vamos a cumplir un sueño. Para los que somos del interior no es nada sencillo ver a la Selección; es muy complicado. Y nosotros nos vamos a dar el gusto", celebra dejando en claro que nada le importa, ni siquiera el hecho de que el presupuesto se le haya ido de las manos.