Las universidades, como “incubadoras tecnológicas”

Las universidades, como “incubadoras tecnológicas”

Estrategias para vincular la investigación académica y los recursos públicos y privados

MÓNICA TIRADO, secretaria de Ciencia y Técnica de la UNT. MÓNICA TIRADO, secretaria de Ciencia y Técnica de la UNT.

La ciencia en la Universidad nacional de Tucumán se vuelca hacia las prestaciones de salud y hacia los servicios a la comunidad, según informa Mónica Tirado, secretaria de Ciencia y Técnica de la UNT. “En el contexto actual, es imperativo que las universidades actúen como incubadoras tecnológicas, aprovechando el talento de investigadores y profesionales en diversas disciplinas, incluyendo ciencias exactas, derecho, economía y divulgación científica”, explica. “Para ello es fundamental crear un ecosistema robusto y dinámico que facilite la vinculación entre la investigación académica y los recursos públicos y privados”, añade.

En un resumen de las actividades, la secretaria destaca que se han llevado a cabo iniciativas para fortalecer la investigación y la innovación en la región. Un evento destacado fue la charla “Transformando la ciencia en commodities”, impartida por Roxana Chehín, directora del Instituto de Medicina Molecular y Celular aplicada (Immca), una institución que integra la UNT, el Conicet y el Siprosa. En la presentación se enfatizó la importancia de convertir los resultados de la investigación en servicios y productos tangibles, como patentes, para contrinbuir al desarrollo económico y social. Un ejemplo significativo –explicó- es “Pegasus” (o DAD 9), una nueva molécula con potencial en el tratamiento del Parkinson, que ha sido patentada en EEUU y en la Unión Europea, y próximamente en China y en Corea del Sur. “Tenemos tres patentes que están en uso, que van a dar ganancias y demás. Dos de Conicet para las plantas del Insibio -que ya están dando regalías- y la de Chehín, dijo. “Y hay 27 patentes que no están activas, que hay que darles caminos, acompañamiento; la idea es hacer como una incubación, o sea empresas de base tecnológica dentro de la UNT para los primeros estadíos y que después esas empresas se desarrollen”.

En este sentido, dijo que la Scait colabora estrechamente con la Unidad de Vinculación Tecnológica de la UNT, para facilitar gestiones en proyectos de investigación. “Llegamos a casi 500 proyectos de investigación de alto nivel que tienen productos que ya están prácticamente listos, que hay que darles una vuelta para que salgan”. En breve se anunciarán los nombres de 90 becarios seleccionados para recibir las becas estímulo a la vocación científica que otorga el Consejo Interuniversitario Nacional. También se lanzará la convocatoria para las becas estudiantiles de investigación que otorga la UNT.

Convenio estratégico

La UNT está trabajando en un convenio estratégico con el Siprosa y el Conicet para permitir el uso compartido del resonador magnético nuclear (RMN) del Laboratorio de Investigación y Servicios Analíticos (LISA), “para mejorar los servicios de salud pública y apoyar la investigación en medicina traslacional”. El resonador, adquirido a inicios de la pandemia, “se usaba en investigación, no en aplicación. Este equipo requiere de la compra de helio, que cuesta como 15.000 dólares anuales. En el convenio con el Siprosa, que trae helio para sus resonadores en el Centro de Salud, vamos a compartir”.

También se está agilizando en el Instituto de Datación y Arqueometría (iInDyA), ubicado en la Universidad de Jujuy, instituto de quíntuple dependencia el que participa la UNT. Ellos tienen un equipo valiosísimo de datación de piezas arqueológicas y además sirve para control de calidad de los alimentos que vayan a ser exportados a especialmente a Estados Unidos y la Unión Europea. Es una exigencia de la medición del carbono que tiene cada alimento para el ingreso en el mercado común europeo. Nosotros estamos haciendo esos análisis con elementos que estamos exportando pero hacemos los análisis en Bélgica, en Holanda y los pagamos en euros. Y nosotros tenemos el equipo. Estaba puesto en un galpón. En septiembre de 2022, con el programa Construir Ciencia, se levantó el laboratorio; nos está faltando 15% para terminarlo”.

Tirado señaló que la Scait también integra la mesa de Diálogo del Sistema Científico Técnico de la Provincia, convocada por el secretario de Planeamiento de la Provincia, Julio Saguir, en la que se han definido objetivos, metas y acciones para un plan estratégico científico y tecnológico al 2030, junto a la UTN, la Unsta, la USP-T, el Conicet, el Inta, la Eeaoc, el Inti y la Fundación Miguel Lillo. También, para mejorar los estándares de rendimiento académico e investigación en la UNT, la Scait ha constituido un grupo de trabajo interdisciplinario compuesto por la secretaria Tirado, la decana de Ciencias Naturales, Virginia Abdala, los consejeros del Ciunt, Sergio Georgieff, Carlos Nieto, Gabriel Pereira, Horacio Madkur –secretario de relaciones Internacionales-, y Beatriz Álvarez de la Facultad de Ciencias Económicas. Este equipo se ocupa de identificar áreas de mejora y desarrollar estrategias que no sólo eleven la calidad educativa y de investigación sino que también contribuyan a mejorar la posición de la UNT en los ránkings universitarios a nivel nacional e internacional.

También la Scait mantiene una relación activa con la Secretaría de Relaciones Internacionales y Empresariales de la Provincia, a cargo de Josefina Domínguez, para aunar esfuerzos, recursos y contactos estratégicos para potenciar la actividad científica y la aplicación de sus resultados, promocionando la difusión internacional de los proyectos de investigación de la UNT.

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