Funcionarios del Gobierno y dirigentes de diversos gremios del sector de la salud pública comenzaron ayer con las negociaciones salariales. No se habló de cifras puntuales de incremento; de hecho, los referentes sindicales se retiraron de la Casa de Gobierno a la espera de propuestas concretas por parte del Poder Ejecutivo provincial.
Los encuentros contaron con la participación de los ministros de Gobierno y Justicia, Regino Amado, y de Salud Pública, Luis Medina Ruiz; de los secretarios de Gobierno y Relaciones Institucionales, Raúl Albarracín, y de Acción Política y Comunitaria, Daniel García. También participaron integrantes del equipo de asesores del Ministerio de Economía y Producción de la provincia. Asistieron los representantes gremiales Renée Ramírez (ATSA), Noemí Díaz (Sumar), José Gerbán (AME), y Julián Nassif y Adriana Bueno (SITAS).
Ramírez destacó la importancia de concretar un ajuste favorable para el personal de salud, subrayando la necesidad de incorporar el monto acordado en el sueldo básico y de que el ajuste contrarreste la inflación que afecta al sector.
Díaz (Sumar) expresó la necesidad de resolver las cuestiones salariales de manera equitativa y transparente, pidiendo una revisión exhaustiva del acuerdo paritario para asegurar que los ajustes respondan a la realidad económica actual.
Por su parte, Gerbán (AME) planteó que se debe aumentar el coeficiente de nivel del personal de salud y solicitó que el ajuste se refleje en el sueldo básico.
Inflación
Por el lado de los autoconvocados de la salud, Julián Nassif mencionó que el gremio busca incorporar el monto resultante del acuerdo paritario anterior en los sueldos básicos, teniendo en cuenta la alta inflación; y Adriana Bueno subrayó la importancia de concretar ajustes salariales y de ofrecer condiciones dignas para los trabajadores de la salud.
El ministro Amado adelantó que se convocará a reuniones técnicas la próxima semana para discutir cifras y propuestas concretas.