La Justicia ordenó este viernes conocer las llamadas entrantes y salientes que se realizaron Alberto Fernández y Fabiola Yáñez, quien lo denunció por violencia de género. La medida, adoptada por el juez federal Julián Ercolini, abarca el período del inicio del 2016 hasta fines del año pasado.
Por otra parte, el magistrado además rechazó hacer una inspección judicial a la Quinta de Olivos.
Se trata de parte de las medidas de prueba que el fiscal federal Ramiro González le había solicitado al juez este miércoles cuando imputó formalmente a Fernández por los delitos de lesiones leves y graves doblemente agravadas por el vínculo y por amenazas coactivas.
El período de las llamadas van desde 2016, cuando Yáñez relató que fue obligada por Fernández a hacerse un aborto, hasta fines de 2023, año en el que según denunció la ex primera dama siguió el hostigamiento. También fue el final del mandato presidencial de Fernández, consignó Infobae.
El fiscal quería conocer todas las llamadas que habían recibido Yáñez y Fernández pero la querella de la ex primera dama, a cargo de la abogada Mariana Gallego, pidió que a los fines de la causa se limiten a las comunicaciones entre ellos dos.
En tanto, el juez rechazó “una inspección judicial de la quinta de Olivos, sus adyacencias y anexos”, tal como había pedido la Fiscalía. El magistrado entendió que hoy ese medida no es conducente para el estado de la investigación.
Entre otras medidas, el fiscal también citó como testigos a seis personas, cuyas fechas de declaración se terminaban de definir y que en principio comenzarían la semana que viene. Los convocados a declarar son María Cantero, ex secretaria privada de Alberto Fernández; Federico Saavedra, ex jefe de la Unidad Médica Presidencial; Miriam Yáñez Verdugo, la madre de Fabiola, Sofía Pacchi, amiga de Fabiola y una de las que estuvo en la fiesta de Olivos, y la periodista Alicia Barrios. Fabiola dijo que todos de distintas formas sabían de las agresiones que estaba sufriendo, También fue citado Daniel Rodríguez, intendente de la Quinta de Olivos durante la presidencia de Fernández.