La edad es el principal factor de riesgo para desarrollar alzheimer: es mucho más frecuente después de los 65 años. Sobre eso, no podemos hacer nada. Tampoco podemos modificar la predisposición genética.
Pero hay todo un combo de condiciones que incrementan las chances de desarrollar demencia que se pueden prevenir o manejar: la alimentación es una de ellas y ejerce un rol clave en otras, como la hipertensión, la diabetes y el exceso de peso.
En este sentido, los complementos de aceite de pescado podrían ayudar a las personas mayores de alto riesgo a evitar la enfermedad de alzheimer, según un estudio reciente
El aceite que se puede incluir en las comidas y ayuda a reducir el riesgo de alzheimer
La investigación, recientemente publicada en JAMA Network Open, una revista médica de divulgación de la Asociación Médica Estadounidense, se realizó durante tres años y analizó a 102 voluntarios de entre 75 y 95 años. Se centró en los efectos de los ácidos grasos omega-3, componentes principales del aceite de pescado, en la salud cerebral.
El estudio se enfocó en un grupo de individuos que, a pesar de tener pocos o ningún signo de deterioro cognitivo, mostraban los primeros indicios de daño neurológico, conocidos como lesiones de la materia blanca. A lo largo del tiempo, estas lesiones pueden contribuir al desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Aunque el tratamiento con omega-3 no mostró diferencias significativas en la mayoría de los participantes, un subgrupo específico presentó una notable mejora. Este estaba compuesto por personas portadoras del gen APOE4, que se asocia con un mayor riesgo de desarrollar Alzheimer.
En estos individuos, los ácidos grasos omega-3 lograron ralentizar la degradación de las células nerviosas, un indicador crucial de la salud cerebral.