La chica que conoció el stand up cuando se mudó de Ceres a Buenos Aires y aprendió por un curso, es la misma que hoy no tiene espacio para otorgar entrevistas en su cargada agenda.
Laila Roth presentará su unipersonal esta noche a las 21 en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265) para reírse de “las pavadas de la vida” y promete interactuar con el público. Desde la Argentina hasta Uruguay, Chile, España y recorriendo ciudades como Ámsterdam, Utrecht, Londres, Madrid y Barcelona, la actriz llena salas. “Yo siempre hice teatro, clown, impro. El humor siempre me interpeló para hacer comedia”, comenta.
En un reportaje que le hizo la revista Ohlalá!, la artista señala que se pone un límite: “No lastimar gente que siento que ya la sociedad lastima un poco. Hay un concepto que es el punching down, no me interesa pegar hacia abajo, digamos. Ese es un límite para mí. No me interesa reírme de alguien que tiene una discapacidad, por ejemplo. Al menos no me interesa reírme de que tenga la discapacidad. Un límite es que sea gracioso. Discursivamente, creo que, en todo, no solamente en la comedia, cuando hablamos de uno a uno, muchos dicen algo agresivo y después: ‘Ja, era un chiste’. Pero si nadie se rió, no sé si fue un chiste”.
Roth admite que tiene un montón de colegas que son “excelentes, pero hoy todavía no llenan salas”. “Es simplemente una cuestión de tener la suerte de la exposición, de que tal vez tengas un video que se viralice. Hay cosas que no tienen que ver con tu talento sino con otros factores que hay alrededor. Creo que en el país estamos llenos de talentos en todos lados”, describió.
Como este diario viene informando desde el año pasado se observa una gran cantidad de shows de stand up, entre locales y visitantes.