09 Agosto 2024
Las técnicas de relajación son las formas más recomendadas de controlar el estrés de forma natural y sin la necesidad de medicación. El spa es el sitio por excelencia de la relajación, pero algunos factores como el tiempo, la familia y los costos de estos tratamientos hacen que se vuelva un tanto inaccesible.
Sin embargo, es posible crear tu propia rutina de relajación y llevar algunos de esos tratamientos al hogar. Algunas prácticas pueden realizarse de manera individual, pero también hay algunas que pueden practicarse en pareja o en grupo.
Cómo crear un ambiente de relajación
Uno de los principales obstáculos para crear un espacio relajados son los niños. Es que muchos fueron criados de forma que es muy difícil mantenerlos en calma. Una de las propuestas para lograr que entren en un clima de relajación es hacerlos parte de todo el proceso. Por un lado, es útil saber qué cosas les relajan, como las caricias o los sahumerios. Pero también es importante que formen parte de la organización o de la puesta en práctica de cada actividad. Para ello, se puede presentar como un juego de día de spa. Siempre será necesario contar con elementos que no distraigan demasiado su atención como para romper el clima.
Otros puntos que ayudan a crear un ambiente relajado son la iluminación, la musicalización o sonorización y los aromas. Cada momento y cada disparador puede estar asociado a una sensación diferente. Los spa suelen tener luces tenues o muy bajas, sonidos relajantes como música para meditación y también suelen ambientarse con aromas como lavanda o cítricos.
Cómo llevar el spa a tu casa para relajarte
Hay uan infinidad de técnicas que pueden aplicarse sin necesidad de contar con aparatos sofisticados y costosos. Estas son algunas de ellas.
Masaje capilar. Es una práctica que puede realizarse tanto de forma individual como en parejas o grupal. Consiste en utilizar los dedos para frotar con suavidad el cuero cabelludo. Para ir un paso más allá, se puede identificar qué tipo de cabello tiene una persona y buscar los productos acordes para hacer algún baño de crema. Es un procedimiento que puede tomar de 15 minutos a una hora.
Mascarillas. Las mascarillas suelen ser económicas. Pueden comprarse casi en cualquier bazar o tienda de estética y hay una amplia variedad: desde humectantes y relajantes hasta refrescantes con aromas. Pero también se pueden preparar en casa. Un buen ejemplo de mascarilla de limpieza puede ser la que se prepara con aloe vera y azúcar o miel y café. Se debe aplicar sobre el rostro y masajear en forma circular para remover las impurezas de la piel. Puede tomar de 5 a 20 minutos.
Skin care. Los verdaderos especialistas de skin care se preguntan si las personas solo tienen piel en el rostro, porque cuando se habla de rutina de skin care, suele hacerse referencia únicamente al cuidado facial. Sin embargo, son técnicas que pueden aplicarse para mejorar la salud de la piel de todo el cuerpo. Pueden hacerse masajes con cremas hidratantes para espalda, brazos y piernas o sales especiales para tomar un baño relajante. Puede tomar en torno a media hora.
Cuidado de manos. Otra actividad para un día de spa en casa es la manicura. No es necesario hacer un tratamiento de esmaltado. Es suficiente con usar en las manos las mascarillas caseras recomendadas para la cara que son de preparación sencilla. También se pueden usar las cremas que hay en casa para lograr una hidratación profunda. Este tratamiento puede durar de 10 a 30 minutos según la cantidad de pasos que se incluyan.
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