Por Bárbara Nieva
09 Agosto 2024
ARCHIVO LA GACETA
La sesión de ayer en el Concejo Deliberante estuvo cargada de tensiones por una variedad de temas. Fueron unos 20 proyectos los que se debatieron en el recinto, siendo uno de los más importantes el que tiene como objetivo limitar de manera progresiva la actividad de tracción a sangre que realizan los carreros. Esto se hará a través de un Registro Único de Carreros (RUC) que funcionará por 180 días y que promete asistencia económica y capacitaciones en oficios para la consecuente inclusión de los ciudadanos en el mercado laboral. También hubo homenajes y distinciones en el inicio del encuentro del que además participó la intendenta Rossana Chahla, para presenciar la asunción de Eduardo Molina en reemplazo de su madre, Elena Cortalezzi, en el bloque oficialista.
El proyecto sobre la creación del RUC fue impulsado por Carlos Ale (Partido por la Justicia Social). El concejal valoró que con este programa se le permitirá al carrero acceder a un trabajo digno, en un contexto social en el que el porcentaje de pobreza e indigencia continúa creciendo.
Las capacitaciones serán brindadas por la autoridad de aplicación del Departamento Ejecutivo, entre las que se considera el Centro Municipal de Capacitación de Oficios (Cemco). Además, se definió que los ciudadanos inscriptos en el RUC tendrán la alternativa de entregar su carro y los animales declarados, o quedárselos pero asegurando el mantenimiento de los mismos en condiciones dignas. Durante el análisis de los 10 artículos del proyecto, se coincidió en agregar una salvedad: la circulación de carros de tracción a sangre serán permitidos únicamente en el caso de que se trate de festividades o eventos culturales o religiosos que realizan esta actividad en fechas establecidas.
La iniciativa de Ale va en línea con lo sancionado en la Legislatura en abril, acerca de la prohibición de la circulación de vehículos de tracción a sangre. Este texto impulsado por el legislador Hugo Ledesma plantea la sustitución de vehículos, la reconversión laboral de los usuarios y campañas de concientización sobre el cuidado de animales. Además, fija que la prohibición comenzará a regir a partir de un año de la promulgación de la ley, lo que permitirá la preparación y el trabajo con todos los sectores involucrados.
En el recinto se habló de esa norma. “El gobernador no la promulgó (a la ley) ni la publicó, incumpliendo -además- la Constitución Provincial, pero sin embargo estamos ante una necesidad de atacar el problema. Es correcto y lo felicito (a Ale) por presentar un proyecto tan pulido que nos permite llevar una propuesta concreta a un problema real”, defendió el radical Leandro Argañaraz.
En este sentido, el edil Federico Romano Norri (UCR) recordó su paso por la gestión municipal, como secretario de Atención y Urgencias Municipales, en la que se planteó la posibilidad de acceder a un moto carro a quienes voluntariamente manifiesten la intención de dejar la actividad de tracción a sangre, que finalmente no tuvo éxito. “Ahora hay políticas de estado; me parece que es el momento. No es un elemento menor que sean 50.000 tucumanos los que dependen directa o indirectamente de esta actividad”, remarcó.
Otras voces
Le siguieron las voces de Alfredo Terán de Zavalía (Fuerza Republicana) y Gustavo Cobos (UCR). “Hay tres temas que son importantes: el cuidado animal, las situaciones propias que hacen al tránsito vehicular a partir de la utilización de carros y, la parte más relevante, cómo compatibilizar estas dos cuestiones con la gente que vive de esta actividad”, dijo el primero. En tanto, Cobos resaltó como virtud la idea de “poner sobre la mesa toda la problemática”. “Estamos diciéndole al municipio que para eliminar esto hay que darle alternativas de subsistencia a quien vive de la actividad; hay realidades en Tucumán que uno no las puede esconder”, aseveró.
Así también opinó José María Franco (Unión por la Patria), sobre la importancia de no seguir sumando leyes que establezcan prohibiciones directas, porque “nunca funcionan”. “Si uno no tiene en cuenta el contexto social, económico y familiar sobre por qué hay gente que usa la tracción a sangre, no sirve y se hace imposible el cumplimiento de la ley. Hay que considerar situaciones sociales, costumbres y formas de vida”, manifestó.
José María Canelada (UCR) habló del contenido ético de la legislación. “Dejar de tratar a los animales como cosas es un posicionamiento ético que los tribunales de Argentina reconocieron. Además, sobre las culturas; si nos aferráramos a la idea de que las culturas son invariables, intocables, no se habrían prohibido, por ejemplo, las corridas de toros en otros países. Esto tiene que ver con la participación del derecho; con pensar normas que desafíen a las culturas cuando sabemos que los sistemas de valores van mutando. Es saludable y es parte de la praxis de cualquier órgano institucional”, sostuvo.
Freno a la app para taxis: el proyecto fue devuelto a comisión; el Concejo recibirá a representantes hoy
La iniciativa que planteaba modificaciones en la ordenanza del Sutrappa y la creación de una plataforma digital para taxistas fue devuelta a comisión en la sesión de ayer. Los ediles coincidieron en que el proyecto debía ser “mejorado” con la participación de todos los bloques políticos “para llegar a buen puerto y que realmente (la propuesta) sea de utilidad”. Además, el presidente del Concejo Deliberante, Fernando Juri, junto a los miembros del comité de Transporte, recibirá hoy a representantes del sector taximetrero y a funcionarios de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán para abordar la problemática frente a Uber y tratar de encaminar una solución. El planteo de los choferes es que la actividad está en decadencia desde que la plataforma digital privada se instaló en la Provincia. Anteriormente, los taxistas habían firmado un acta acuerdo con el Ejecutivo municipal sobre el tratamiento del tema.
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