´Los alumnos de la escuela municipal de Yerba Buena “Petrona de Adami” tampoco podrán usar celulares, desde el 15 de este mes. Así lo anunció ayer Victoria Desjardins, directora de Educación del municipio. Una medida similar se anunció en las últimas horas en la Ciudad de Buenos Aires, donde se implementará una nueva regulación sobre el uso de teléfonos celulares en las escuelas con el objetivo de "mejorar la calidad de la enseñanza y proteger el desarrollo de niños y adolescentes".
Desjardins dijo que tanto estudiantes como docentes deberán dejar sus teléfonos móviles en una caja al inicio de cada clase y los recuperarán al retirarse. Agregó que esta política busca reducir los efectos negativos del uso excesivo de pantallas, mejorar la concentración y fomentar la socialización.
Aseguró que la decisión, que llevaba meses en debate, fue adoptada tras una evaluación del impacto del uso de teléfonos en las aulas. Según Desjardins, el uso de móviles en clase está relacionado con mayor dispersión, ansiedad y falta de enfoque entre los alumnos. Incluso en los recreos, el exceso de pantallas ha reducido la interacción social. Una preocupación destacada es la disminución de habilidades básicas de escritura y el empobrecimiento del vocabulario de los estudiantes. Desjardins subraya que los docentes enfrentan el reto de captar la atención de alumnos acostumbrados a la rapidez de los contenidos digitales, lo que ha reducido su capacidad de concentración.
También preocupa el aumento de apuestas en línea entre los jóvenes. Para abordar este problema, la escuela ofrecerá talleres de educación financiera, con el objetivo de enseñar a los estudiantes sobre los riesgos de las apuestas.
Resistencia
La medida, no obstante, tuvo resistencia, especialmente por parte de los padres, que manifestaron su inquietud sobre cómo comunicarse con sus hijos durante el horario escolar. Las autoridades respondieron que pueden hacerlo a través de la secretaría de la escuela, como se hacía antes.
A pesar de la resistencia inicial, Desjardins confía en que la prohibición de teléfonos en la escuela mejorará el ambiente educativo.