Daniella Mastricchio, conocida por su papel de Sol en la emblemática serie Chiquititas, compartió su conmovedora historia en una entrevista. La actriz, que alcanzó la fama a los siete años, rememoró su tiempo en el exitoso programa de Cris Morena y el dramático giro que dio su vida después de su abrupto final.
En su participación en el ciclo La última cena, Mastricchio confesó que la fama y el éxito de Chiquititas no vinieron sin su cuota de dificultades. “A mí lo que me pasó por varios años fue que tuve vergüenza. Fueron cuatro años infernales de éxito, de teatros, de no tener tiempo, ni cumpleaños, pero también de no tener ninguna necesidad”, explicó Daniella, hoy de 36 años y madre de tres hijos.
La actriz de Chiquititas: "Me quedé sin nada"
Mastricchio reveló cómo, tras el cierre de Chiquititas, experimentó una caída abrupta en su situación económica. “No te voy a decir que alguna vez nos faltó algo, pero lo cierto es que la casa, la pileta, los viajes y los autos, los compramos con Chiquititas. Y de repente, cuando termina Chiquititas, literalmente, me quedé sin nada, incluso sin familia y amigos”.
A los once años, Daniella dejó el exitoso programa y, con tan solo 14 años, se encontró trabajando en una heladería para poder sobrevivir. “Yo terminé Chiquititas a los once, a los doce terminé séptimo grado. Digo esto de la fama: cuando entras no podés salir. Me encontré a los 14 años trabajando en una importante cadena de heladerías para poder comer. Dos años después de Chiquititas estaba en una heladería”, recordó.
Un refugio en la música
A pesar de las adversidades, Daniella encontró una nueva pasión en la música. Actualmente, se dedica al canto y recientemente lanzó un videoclip titulado “Ni Da”. En una entrevista con Revista Pronto, Mastricchio habló sobre el significado de su nueva canción y la inspiración detrás del videoclip. “A esta canción la escribí hace ya un tiempito, el año pasado, en un momento en el que estaba cansada de que distintas personas pendientes de la vida de otros se la pasaran tirándome y hablando mal de mí, de mi persona, mi familia, mi carrera y toda mi existencia”, confesó.
En el video, Daniella utiliza un ataúd como metáfora de su renacimiento y reafirma su regreso con fuerza. “Supongo que me creía muerta y me quería ver muerta”, sentenció. “Básicamente me creían muerta en mi carrera y mi vida personal pero no mi amor, Dani vino súper recargada y con más para dar”.
El videoclip también rinde homenaje a su pasado en Chiquititas, con un vestuario inspirado en el teatro del año 96, incluyendo el icónico piloto de flores transparentes y las botas de lluvia. “Todo tiene una historia más allá de la letra”, concluyó.