Por Jorge Figueroa
Hace 11 Hs
VIAJE A LOS INICIOS DE SUMO. Roberto Pettinato eligió los temas más relacionados con la primera época.
“No bajo a lo obvio. La gente no va a ir a escuchar cómo toco el saxo, no va para oír al saxofonista de Sumo. En todo caso, le interesa que soy el único vivo que comenzó en el grupo”, dice Roberto Pettinato. “Van a escuchar al único integrante original que hace sus temas”, explica una y otra vez, con algún sarcasmo y humor. El músico no recuerda cuándo vino a esta provincia; lo hizo con una breve presentación cuando se inauguró la franquicia Loco por el Fútbol, en 25 de Mayo al 700, al comenzar el milenio.
En la entrevista con LA GACETA se preocupó por aclarar que no es una banda homenaje o tributo y que estuvo siete años con Luca Prodan. Y asegura: “Nosotros nos movíamos como una familia, operábamos como tal, era un grupo en el que componíamos todos juntos, fue la mejor banda de la historia”. En 2017 editó “SumoXPettinato”, un disco doble compuesto por 16 reversiones de canciones de aquella formación, que fue grabado en una sola jornada.
Esta noche desde las 21 se presentará en Puerto Cultural Libertad (Las Piedras 1.850) con su grupo integrado por Esteban Latrecchiena (guitarra), Rafa Franceschelli (bajo), Silvio Marzollini (teclados) y Martín Minervini (batería). La banda invitada como telonera será la tucumana La Rolling Song (obviamente, tributo a los Rolling Stone). Pero además, “siempre hay alguien que se engancha y sube con nosotros”, adelanta el músico.
El showman
Como en las numerosas entrevistas que realiza, comienza asegurando: “No es un homenaje, no son covers, no es una imitación, es ‘Sumo x Pettinato’”. En todas las notas dice lo mismo.
Eso sí, se preocupa por preguntar si la conversación ya se inició para ponerse en modo grabación. Porque Pettinado es músico, fue conductor de televisión, humorista, pero ante todo un personaje; un showman, aunque haya dicho que no le importa ser popular.
El show ha despertado gran expectativa, y parece asegurarse una sala llena.
- Sumo marca una bisagra en el rock argentino...
- La clave para mí se concentra es que no es new wave ni rock, sino sería lo mismo. Hay como un acercamiento a Génesis, medio progresivo; después que murió Luca en sus comienzos toda esa cosa psicodélica que había se perdió. Por eso está en todas las épocas. Con Sumo pasa el tiempo, pero se sigue escuchando. ¿Por qué The Beatles se oyen? Porque nosotros se los hemos pasado a nuestros hijos y nuestros hijos a los suyos, y van por las generaciones. No es el caso de los Abuelos de la Nada, que es una banda de época, por ejemplo; todo bien.
- Y entonces, ¿por qué la gente te escucha?
- Cuando uno va a ver a Ringo (Starr) sabe que va a tocar “Submarino amarillo”, pero estás viendo a un beatle vivo, fue uno de ellos. Conmigo estás viendo un pedazo de Sumo. Alguien me dijo que mantengo ese espíritu, y es lo mejor que me podían haber dicho. Venís a ver algo muy parecido a lo que era. Estuve siete años ahí. No imito ni pongo la voz de Luca Prodan, pero sí rescaté todos esos elementos que tenía Sumo. Mi show guarda esa psicodelia y locura atómica que tenía el grupo. Rescato la experimentación, los solos largos y todo lo bueno que hoy por hoy, en un mundo de cancioncitas, no sucede más. Vos veías en el escenario a un pelado y atrás de él siempre un mameluco naranja y una barba. Era yo. Y después siempre me decía por qué no cantar y me respondía: no, porque querés imitar a Luca. Hasta que me di cuenta que tenía que cantar los temas como siempre. Este es un viaje al corazón de la primera época de Sumo, antes de la prolijidad de los discos, cuando la música emanaba potencia y personalidad, y era lo principal.
- ¿Qué temas vas a tocar?
- Son 14 o 13, o pueden llegar a 17. Venimos probando. No siempre un show largo es bueno. Vemos que con menos puede ser más compacto, aunque por supuesto alguno dirá que está todo bien, pero que faltaba este o aquel. “Estallando desde el océano” (1986) está en la lista y “Los viejos vinagres” (1986) con el que hacemos un mix con “La rubia tarada” (1985), pero en mi menor. Y “Night & Day” (1983) que estuvo en el álbum de “Corpiños en la madrugada”. Hay diversos temas que hacemos con más elaboraciones.
- Decías que elegiste el primer Sumo...
- Porque su primera etapa me parece la más psicodélica. Nosotros éramos un grupo que improvisaba muchísimo, y esa es la idea de esta banda. Una mezcla de un poco de jazz, un poco de acid rock y demás. Hace años que venimos tocando y la gente queda en un estado completamente alucinado, porque el sonido es tremendamente distinto a lo que suena una banda nacional.
- Llegás por una gira…
- Sí, y es un tour muy federal y siempre escapando de la gran ciudad. Vamos a ir por todo el país, donde no tocan los demás. En cada pequeño pueblo donde hay una iglesia y una Municipalidad estaremos, porque la gente dirá, y qué hacemos esta noche… y vendrá a vernos a nosotros.
- Has escuchado bandas de este tiempo…
- Sí, me gustan varias. Creo que hay un rock-canción y un rock-Calamaro, que posa de tener “cool” en la que hay un montón de grupos. Las otras surgen de lo suburbano, del under, del sótano, así las llamo yo. Son pibes que salen de allí. Me gustó Estelares. Me siguen gustando los grupos indies y desde ya las bandas que nunca pasaron de moda.
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