FRANJA DE GAZA.- El mortal ataque en Irán contra el líder de Hamás Ismail Haniyeh, adjudicado por el grupo islamista a Israel, desencadena advertencias de venganza que pueden escalar el conflicto en la región, golpeada por las hostilidades en curso en Gaza. Irán y el grupo chiita Hezbollah en Líbano, advierten una venganza contra el Estado de mayoría judía, mientras Qatar y Egipto -países que median por un alto al fuego en el enclave palestino- alertan que estas acciones crean mayores obstáculos para conseguir una tregua que ponga fin al sufrimiento de más de un millón de palestinos en la devastada Franja de Gaza.
Israel asegura que no quiere una guerra, pero que se prepara para cualquier escenario.
El brazo armado de Hamas, las Brigadas al Qasam, sostiene que su muerte “no quedará impune”, por lo que tendrá consecuencias regionales. Es “un acto peligroso que lleva la batalla a un nuevo nivel y tendrá importantes consecuencias en toda la región (...) Es momento de que la locura sionista acabe, de detener a este enemigo enfurecido, y de que su mano, que causa problemas aquí y allá, sea cercenada para disuadir su agresión”, amenazó el grupo.
En Irán, donde ocurrió el ataque contra Haniyeh, el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, prometió una venganza contra Israel, país que asegura está detrás del ataque en Teherán, donde Haniyeh se encontraba de visita oficial. “Con este acto, el criminal y terrorista régimen sionista (en referencia a Israel) ha preparado el terreno para un duro castigo y consideramos que es nuestro deber vengar el asesinato en el territorio de la República Islámica de Irán” advirtió Jameneí en un comunicado, citado por la agencia estatal de noticias IRNA.