En el dinámico y cambiante mundo del fútbol argentino, los cambios de fichas y las sorpresas son moneda corriente. Y el arribo de Juan Ignacio González Quiroga en el puesto de arquero de Atlético Tucumán y la titularidad de Tomás Durso, obligaron a José Devecchi a buscar nuevos horizontes en su carrera.
Tras una etapa en la que no alcanzó el rendimiento esperado y con el mercado de pases al “rojo vivo”, el arquero llegó a un principio de acuerdo con Banfield. De esta manera, estaría a punto de ponerle punto final a su paso por el “decano”. Devecchi, que había llegado proveniente de Sarmiento, en las próximas horas viajaría a Buenos Aires para sumarse al plantel que conduce Gustavo Munúa. San Lorenzo, club dueño de su pase, lo cedería por 18 meses y con opción de compra.
Devecchi había llegado a Atlético con el antecedentes de haber sido una figura destacada en el “verde” de Junín. Sus actuaciones bajo los tres palos habían sido clave para que Sarmiento pudiera asegurar su permanencia en la elite. Tal es así que en la Copa de la Liga del año pasado, había recibido 60 disparos y logró un puntaje de 9,2 en goles evitados. Además, en noviembre de 2023 logró un hito: se transformó en el que más goles salvó por cada 90 minutos, contando las cuatro principales ligas del continente.
Según el sitio DataFutebol de Brasil, en ese entonces Devecchi obtuvo un promedio de 0,66 goles prevenidos por cada 90 minutos. Con esos números superó a destacados arqueros de renombre como Allison, de Querétaro de México (0,52), Cleiton, de Bragantino de Brasil (0,43), Facundo Cambeses, de Banfield (0,41) y Lucas Chaves, de Huracán (0,39).
No obstante, desde su arribo al “decano” bajó significativamente su producción. En la Copa de la Liga, Devecchi fue el último en esa tabla. Su media de goles evitados cambió a -4.6, dado que recibió 44 tiros y su porcentaje de atajadas fue del 57%; la más baja del certamen.
Con la camiseta de Atlético, disputó 15 partidos (14 por la Copa de la Liga y uno por la Copa Argentina), en los que recibió 23 goles y mantuvo el arco en cero en tan sólo cinco ocasiones. Justamente ese bajo rendimiento provocó el enojo entre los hinchas del “decano”, que pidieron fervorosamente por otro nombre para ser el “guardián” del arco.
Devecchi, que pasó de ser héroe (en Sarmiento) a villano (en Atlético), finalmente perdió terreno. La salida de la dupla integrada por Favio Orsi y Sergio Gómez significó un antes y un después para la estadía del correntino en 25 de Mayo y Chile.
Con el arribo de Sava, el que se ganó el privilegio de ponerse el buzo de arquero fue Durso, que disputó los ocho partidos que lleva el “decano” en el torneo y mantuvo la valla invicta en tres oportunidades. Además, viene de atajarle un penal a Ignacio Russo, de Instituto. Una acción que le permitió Atlético, luego, celebrar tres puntos gracias al gol de Marcelo Estigarribia.
En Atlético, las expectativas por Devecchi eran altas, pero el arquero enfrentó dificultades que afectaron su desempeño. Los errores y la falta de consistencia llevaron a que el club evaluara su situación y, eventualmente, decidiera buscar alternativas.
La llegada de González Quiroga reflejó la necesidad del equipo de encontrar una solución más estable y confiable en el arco.
Eso culmina con la inminente salida del arquero hacia Banfield en donde competiría en el puesto con Facundo Sanguinetti.