Por Santiago Re
Hace 3 Hs
FESTEJOS. Maduro celebró con sus seguidores, insultó al presidente argentino e invitó a pelear a Elon Musk.
“Como ciudadano venezolano sé que esto es muy complejo, porque tras varios años volvimos a creer que estábamos cerca de un cambio. Aún lo creemos. Tenemos la esperanza de volver a ser libres, de levantar a un país que está quebrado, que tiene sus instituciones rotas y a millones de venezolanos dispersos por el continente y el mundo. Venezuela tiene más emigrantes que Ucrania y Afganistán”, señaló el politólogo venezolano Walter Molina, minutos antes de que un vocero anunciara como ganador de las elecciones presidenciales de ese país a Nicolás Maduro, que iniciará su tercer mandato, prolongando así al chavismo que gobierna hace 25 años el país bolivariano.
Molina, que se considera un exiliado político, había adelantado: “estamos ante un régimen autocrático y ningún dictador quiere dejar el poder. A Maduro solo le queda el uso de la fuerza, así han asesinado y llevado presos políticos. Más del 80% de los venezolanos le dan la espalda, estamos seguros de que ganó la oposición por más del doble de votos porque todas las actas que se publicaron mostraron eso, pero el chavismo está ocultando el resto de las actas que dan como cómodo ganador al (líder de la oposición) Edmundo González”.
El politólogo añadió que al chavismo sólo le quedaba ”robarse la elección, no tienen otra salida, y lamentablemente no la descartamos”.
El especialista remarcó que había una tendencia clara y sustentable que daba a González como ganador de los comicios, al punto de que muchos mandatarios internacionales se expresaron para que Maduro acepase la derrota en paz en caso de que se consumara ese resultado.
Referentes de la izquierda
Gobernantes afines, como Lula Da Silva de Brasil y el ex presidente argentino Alberto Fernández, instaron al mandatario venezolano a que respete la democracia. “Lula para la izquierda es sumamente respetable; Fernández también es un referente y, sin embargo, sus palabras le costaron perder la invitación a presenciar los comicios. Solo por decirle a Maduro ‘se gana y se pierde’ fue descartado como acompañante del oficialismo. El presidente chileno, Gabriel Boric, también de izquierda, le pidió transparencia”, argumentó. Molina no olvidó mencionar al presidente Javier Milei y a su gabinete (alineados en el polo opuesto) que también exigieron transparencia y se atrevieron a considerar ganador a González a raíz de los resultados que se iban conociendo. “Salvo por Irán, Rusia, Nicaragua, toda la comunidad internacional pedía respetar la decisión del pueblo”, agregó.
Molina se graduó en la Universidad Central de Venezuela como licenciado en ciencias políticas. En 2017 resultó herido por la explosión de una bomba -contó- durante una protesta en las calles de Caracas. Ese ataque y la persecución lo llevaron a convertirse en uno de los más de 7 millones de venezolanos que viven en el extranjero.
Se radicó en Buenos Aires, donde conoció a su actual esposa y se instaló, por lo que -reconoce- ningún resultado le haría volver a vivir en su país natal.
Si, la victoria de González le habría devuelto la posibilidad de volver a ver a su madre y de poder despedirse frente a la tumba de su padre y de su abuela (fallecidos durante su exilio).
“Yo ya hice mi vida aquí, pero hay millones de venezolanos esperando poder volver. Dejar que Maduro robe las elecciones ya no es solo un tema de Venezuela. Esto afecta a la región: Colombia tiene problemas con la inmigración venezolana, Brasil y Perú están recibiendo también grandes olas de inmigración y se calcula que habrá millones más que dejarán el país si este régimen perdura”, concluyó.
En Latinoamérica: la desconfianza en la transparencia de los resultados atraviesa fronteras ideológicas
Minutos después de hablar con LA GACETA, el temor de Walter Molina se concretó: un vocero salió a anunciar los -aún en discusión- resultados oficiales, informando que había votado el 59% del padrón y que Maduro se imponía con el 51.2% de los votos sobre el 44.2% obtenido por González. Apenas se dieron a conocer esos números, los resultados fueron cuestionados por varios mandatarios de la izquierda y la derecha, por citar dos ejemplos, por los presidentes de Argentina, Javier Milei, y de Chile, Gabriel Boric.
Las diferencias políticas de dos estadistas la región parecen haber convergido en un punto: la desconfianza sobre la legitimidad de la reelección de Maduro en Venezuela.
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