El síndrome del impostor: una realidad prevalente en mujeres

El síndrome del impostor: una realidad prevalente en mujeres

Un reciente estudio confirma que el síndrome del impostor, donde personas exitosas sienten que no merecen sus logros, es especialmente común en mujeres.

SÍNDROME DEL IMPOSTOR. Cómo afecta ese fenómeno a las mujeres en el ámbito laboral./Foto: Pexels SÍNDROME DEL IMPOSTOR. Cómo afecta ese fenómeno a las mujeres en el ámbito laboral./Foto: Pexels
Hace 2 Hs

El término "síndrome del impostor" fue acuñado por las psicólogas Pauline Clance y Suzanne Imes en 1978. Ellas describieron este fenómeno como la sensación de fraude y fracaso que experimentan personas altamente exitosas, quienes atribuyen sus logros a la suerte o a factores externos en lugar de a sus propias habilidades. Según Clance e Imes, las mujeres son más propensas a sufrir este síndrome debido a los estereotipos sociales sobre el género y la inteligencia.

Lucía Blasco, en un artículo para BBC Mundo, entrevistó a la asesora profesional Aída Baida Gil y la doctora Valerie Young, quienes han estudiado ampliamente este fenómeno. Young señala que el síndrome del impostor afecta a millones de personas en todo el mundo, y Baida Gil explica que aquellos que lo padecen sienten que nunca están a la altura, que no son suficientemente buenos o competentes, y que su éxito se debe a la suerte o al trabajo duro, no a su inteligencia.

Un nuevo estudio revela diferencias de género

Un análisis reciente realizado por investigadores de la Universidad Estatal de California, Fresno, confirmó que las mujeres experimentan el síndrome del impostor con más frecuencia que los hombres. Este estudio, que analizó más de 100 investigaciones, encontró que las mujeres consistentemente obtienen puntajes más altos en las escalas de síndrome del impostor. "Cuando combinamos los resultados de más de 100 estudios que compararon los niveles del fenómeno del impostor entre mujeres y hombres, hay claramente una diferencia con las mujeres tendiendo a puntuar más alto en promedio", explicó el autor del estudio, Paul C. Price, en una entrevista con PsyPost.

Además, encontró que el 75% de las mujeres ejecutivas han experimentado el síndrome del impostor en algún momento de sus carreras, sintiendo dudas sobre su competencia y preocupándose continuamente si están calificadas para su trabajo. Este dato resalta aún más la prevalencia y la intensidad con la que las mujeres experimentan este fenómeno.

El estudio también descubrió que esta diferencia de género es consistente a través del tiempo, a pesar de los cambios en las actitudes sociales hacia el género y el aumento de la representación femenina en la educación superior y las carreras prestigiosas. Los investigadores también encontraron que las diferencias de género en el síndrome del impostor varían según el campo y la región geográfica, siendo más pequeñas en Asia que en Europa y América del Norte.

Implicancias del síndrome del impostor y sus posibles causas

Según la doctora Valerie Young, el síndrome del impostor tiene implicancias significativas para la salud mental y el bienestar, especialmente para las mujeres. Este síndrome puede llevar a la ansiedad, la depresión y la falta de confianza, afectando negativamente el rendimiento académico y profesional.

Las posibles causas del síndrome del impostor incluyen dinámicas familiares durante la infancia, estereotipos de género, diferencias salariales y percepciones de éxito y competencia. Según Aida Baida Gil, las dinámicas familiares pueden jugar un papel crucial, especialmente cuando los padres establecen comparaciones entre los hermanos. Los estereotipos de género también contribuyen, ya que las mujeres enfrentan expectativas sociales que pueden incrementar la sensación de no estar a la altura.

El síndrome del impostor es una realidad prevalente que afecta desproporcionadamente a las mujeres, según estudios recientes. Comprender las causas y las implicancias de este síndrome es crucial para abordar sus efectos y apoyar a quienes lo padecen. Reconocer y validar los logros personales, así como fomentar un entorno de trabajo inclusivo y equitativo, son pasos importantes para mitigar el impacto del síndrome del impostor en la vida profesional y personal de las mujeres.

***

Suscribite al newsletter de LA GACETA  “Completa con picante” y recibí semanalmente una selección de noticias para jóvenes con hambre de futuro. ¡Es gratuito!

Comentarios