Cinco legisladores ligados al ex gobernador Juan Manzur presentaron el primer proyecto de ley para modificar la Carta Magna de la provincia, cuya propuesta fue duramente cuestionada por Enrique Romero. El ex funcionario de Tránsito consideró que se trata de “un proyecto traído de los pelos”.
Según Romero, “la declaración de la necesidad de la reforma debe surgir de un consenso que incluya, aparte de los Partidos Políticos, a la Iglesia, las Universidades (nacionales y privadas), el Colegio de Abogados, ONG y las Fuerzas Vivas representadas en la federación económica, entre otras”.
Reformar parcial o totalmente una constitución “no es un chiste”, dijo. Y agregó: “el arrebato del proyecto no contribuye a la generación del consenso, salvo que hayan interpretado el anuncio de (Osvaldo) Jaldo como una desbocada carrera por la disputa del Poder en la provincia, lo cual sería un grave error atento a que quedan más de tres años de gestión”.
A su entender, la Constitución del 2006 “fue un parto de nalga al no observar el procedimiento establecido, y todos los artículos declarados inconstitucionales afectaron la unidad normativa, y cada artículo declarado nulo o inconstitucional implicó una reforma constitucional de la mano de un poder constituido que no es competente para ello, consagrando la muerte del principio de supremacía de la Constitución”.
Por esto, consideró que “la Ley que declare la necesidad de la reforma necesita tiempo de análisis, por eso la convocatoria debe ser amplia, y desde ya hay que dejar en claro que los convencionales que resulten electos, tienen por encima: tratados internacionales, leyes nacionales, y el temario que fije la legislatura”.
Romero señaló que “El apresuramiento en la presentación del proyecto pone de manifiesto una supina ignorancia, ya que muchos de estos temas, se pueden modificar mediante Ley sin necesidad de reformar la Constitución, como por ejemplo las reformas al Poder Judicial que pueden ser modificadas, si así se considera, a través de la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial”.
Para Romero, Tucumán no necesita un nuevo “adefesio constitucional como el que se hizo para Alperovich, necesita una constitución para todos los tucumanos”.