Esta semana se realizó, por segunda vez, la edición nocturna del Bus Turístico. Más de 100 personas se animaron a descubrir por la noche los secretos de la historia tucumana y se dejaron asombrar por los tesoros del patrimonio arquitectónico y cultural de la capital.
Se trata de una propuesta gratuita para visitantes y para tucumanos; debido al éxito de la convocatoria, este viernes hubo que sumar otro colectivo. Ambos buses repletos rodearon la Plaza Independencia y fueron por calle 24 de Septiembre al Parque 9 de Julio, donde hubo descensos en el Reloj Floral y en el Museo de la Industria Azucarera (MIA), dos atractivos del Parque que fueron recientemente revalorizados.
En el MIA las familias aprendieron sobre la historia de una de las principales industrias tucumanas y sobre la vida de ell Obispo Colombres. Luego pasaron frente a la Casa Natal de Mercedes Sosa. La parada estelar de la noche fue el Cementerio del Oeste, una de las necrópolis más antiguas de la ciudad y poseedora de la reserva de arte funerario más importante de Tucumán. El evento se repetirá el 25 de julio, con inscripción previa.