El frío altera las características del mosquito adulto ya que requiere menos alimento (pica menos) y en caso de tener el virus del dengue en su cuerpo, este tarda más tiempo en reproducirse. Además, las hembras del Aedes tardan más entre una postura de huevos y la siguiente.
- El desarrollo del mosquito depende de la temperatura también en la parte acuática del huevo y la larva. Cuanto más frío, más tarda en madurar el huevo o se demora la larva en convertirse en pupa para dar vida al mosquito adulto.
- Se supone que cuando pasa una cantidad importante de días de frío sostenido -con temperaturas menores a 12° C de forma consecutiva- se mueren los mosquitos. Primero mueren los estados inmaduros acuáticos del Aedes; y luego, los adultos terrestres. Todo esto llevará seguramente a qué se corte la transmisión del virus. Sin embargo, no hay que perder dos cosas de vista: los mosquitos viven dentro de las casas en ambientes calefaccionados, y los huevos del Aedes resisten todo el invierno en “pausa”, esperando las temperaturas adecuadas para eclosionar.