13 Julio 2024
Cómo preparar el budín integral de banana sin azúcar, más sano
En la búsqueda de opciones más saludables y naturales, el budín integral de banana sin azúcar se presenta como una deliciosa alternativa para aquellos que desean disfrutar de un postre dulce sin remordimientos. Esta receta no solo destaca por su dulzura sin azúcar agregada, sino también por su alto contenido en fibra, aprovechando al máximo las frutas maduras.
Cómo preparar el budín de banana
Ingredientes:
3 bananas maduras
2 manzanas chicas
100 ml de aceite
1 huevo
200 g de harina integral
1 cdta. de polvo de hornear
Opcional: ralladura de limón, de naranja o esencia de vainilla
Preparación:
Preparar la fruta: pisar las bananas hasta obtener un puré suave. Rallar las manzanas peladas y sin semillas.
Mezclar ingredientes húmedos: en un bowl grande, combinar el puré de bananas, las manzanas ralladas, el aceite, el huevo y, si se desea, la ralladura de limón, de naranja o la esencia de vainilla. Batir bien hasta que todos los ingredientes estén integrados.
Incorporar ingredientes secos: añadir la harina integral y el polvo de hornear a la mezcla húmeda. Batir hasta obtener una pasta homogénea y sin grumos.
Preparar el molde: verter la mezcla en un molde previamente aceitado o en un molde antiadherente.
Hornear: cocinar en horno precalentado a 180°C (350°F) durante aproximadamente 40-45 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio.
Beneficios nutricionales:
Este budín es una excelente manera de incorporar más fibra a tu dieta, gracias a la harina integral y las frutas. Las bananas maduras no solo aportan dulzura natural, sino también potasio y vitaminas. Las manzanas contribuyen con antioxidantes y fibras adicionales. Al no contener azúcar agregada, es una opción perfecta para quienes buscan reducir su consumo de azúcares refinados.
Consejos adicionales:
Para variar la receta, se pueden agregar nueces picadas, pasas o chips de chocolate amargo.
Este budín es ideal para desayunos y meriendas, acompañado de una taza de té o café.
Si prefieres una textura más esponjosa, puedes separar la clara del huevo y batirla a punto de nieve antes de incorporarla a la mezcla.
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